¿Qué te es bueno para la resaca?

¿Cura para la resaca?

Uf, las resacas… ¡qué puñetero fastidio! Recuerdo una vez, el 15 de marzo del año pasado, después de una fiesta en el bar “La Tasca del Abuelo” en Valencia, me sentí fatal. Gasté 12 euros en un taxi para llegar a casa, ¡y aún así!

La Rooibos me la recomendó una amiga. No te voy a mentir, me hidrató bastante, pero un milagro no hizo. Quizás ayudó un poco a calmar mi estómago, que estaba hecho un lío. Me sentí algo mejor, pero no del todo curada.

En fin, no hay una cura mágica. Beber mucha agua, sí, eso ayuda. Y, sobre todo, ¡moderación! Aprender de los errores, eso sí que es una cura efectiva, aunque más lenta.

¿Cómo quitar la resaca natural?

Uff, resaca. Domingo. Nueve de la mañana. Cortinas cerradas. Cabeza… retumbando como un tambor. Boca… papel de lija. Ayer… fue el cumpleaños de Marta. En “La Bodeguilla”, ese bar con las tapas de bravas que te hacen llorar de… felicidad, o ahora, de dolor de cabeza.

Agua. Mucha agua. De la nevera, fría. Casi duele al pasar, pero necesito algo para este desierto que tengo aquí dentro. No puedo ni pensar en café. Recuerdo una vez… en la feria de mi pueblo. Resaca monumental después de la noche de la verbena. Mi abuela me hizo una infusión de manzanilla. Bah, no me apetece.

Sopa. Eso sí. Sopa de pollo, como la que hacía mi madre. Con fideos finitos. Con trocitos de pan duro. Suena bien. No, no puedo moverme. Demasiado esfuerzo. Sigo con el agua.

Marta… seguro que está tan mal como yo. Le escribo. “Viva el tequila”. Me responde con un emoticono de una cara verde vomitando. Sí, amiga. Viva. Ironía pura. Ojalá tuviera aquí un zumo de naranja natural. El zumo de brick no es lo mismo. No sé por qué. Me levanto como puedo. Dirección: cocina. Zumo. Necesito zumo.

El año pasado, en el festival ese de rock… me pasé tres pueblos con la cerveza. Dos días en cama. Aprendí la lección. Este año… bueno, no tanto. Pero casi.

• Beber mucha agua: fundamental. Fría, del tiempo, con gas… como sea.
• Sopa: de pollo, de verduras… calentita.
• Zumo natural: naranja, pomelo… vitamina C a tope.
• Nada de alcohol: ni una gota. El cuerpo necesita recuperarse.

Creo que voy a pedirle a mi madre que me traiga sopa. Y zumo. Y que se quede a cuidarme.

¿Cuál es el mejor té para la resaca?

¡Ay, madre mía, la resaca! Eso sí que es un drama digno de una película griega, ¡o de mi última fiesta de cumpleaños! ¿El mejor té para combatirla? Ni idea, ¡soy más de ibuprofeno y oscuridad! Pero si te digo la verdad…

El té negro es tu mejor amigo en esos momentos. Es como un superhéroe con capa y anti-resaca incluida. Tiene cafeína, ¡qué alegría!, y antioxidantes que parecen sacados de una película de ciencia ficción. ¡Te rejuvenece!

Aunque el verde también ayuda, no tiene esa fuerza bruta. Es como una amable abuelita que te da una infusión, ¡muy bien, pero poca caña! Y el café… buff, el café es demasiado intenso, ¡es como un cohete que te lanza al espacio directamente desde el sofá! Demasiado potente para un cuerpo destrozado.

Piensa:

• Té negro: El rey indiscutible. Es como un abrazo cálido y reconfortante después de una noche de excesos.
• Té verde: Un buen sustituto si eres de los que le huyen a la cafeína como de la peste. Te revitaliza suavecito.
• Café: ¡Ni se te ocurra! A menos que quieras volar hasta la luna. Es el equivalente a beber lava volcánica cuando tienes sed.

Mi experiencia personal? Pues mira, el año pasado después de la boda de mi prima, terminé con una resaca que me duró tres días. ¡Tres días! Y solo el té negro (y mucho agua, ¡ojo!) me salvó la vida.

Ahora bien, recuerda que esto es solo mi opinión, respaldada por tres días de sufrimiento. Consulta a un médico si tus resacas son algo más que una simple molestia. O si eres de los que terminan pintando cuadros en el suelo con vómito. ¡Ese es otro nivel!

¿Qué bebida es buena para quitar la resaca?

¿Resaca? Electrolitos al rescate y consomé, el amigo sabio. Como el yin y el yang, pero sin la poesía.

• Electrolitos: Es como intentar recargar las pilas de un móvil con un plátano, raro, pero funciona. Reponen lo que el alcohol te robó. Piensa en bebidas deportivas, no en el champán de la noche anterior, por favor. Este año, probé una nueva marca con sabor a pepino y limón…¡un desastre! Pero bueno, electrolitos son electrolitos.

• Consomé: ¡Oh, el caldo milagroso! Como un abrazo calentito para tu estómago enfadado. Recupera esas sales minerales que perdiste mientras intentabas bailar “La Macarena”. Mi abuela juraba que su consomé de pollo curaba hasta el mal de amores. Igual exageraba, pero…¿quién soy yo para dudar de la sabiduría ancestral?

Y ya que estamos, un consejo extra:

• ¡Agua, mucha agua!: No es la solución más emocionante, pero es efectiva. Como ir al gimnasio, nadie quiere hacerlo, pero luego te sientes mejor. Hidrátate como si estuvieras en el desierto del Sahara.

• Un ibuprofeno con moderación: Ojo, no te pases, que el hígado ya bastante tiene. Es como echarle gasolina al fuego…¡pero a veces funciona!

• Evitar el “remedio de la abuela”: No me refiero al consomé, sino a ese trago “para quitar la resaca”. Solo prolongas la agonía, créeme, lo aprendí por las malas. Una vez probé un “cura crudas” con chile y tequila…¡casi me muero dos veces!

En resumen, no hay milagros, pero con electrolitos, consomé y un poco de paciencia, sobrevivirás. ¡Ánimo! Y recuerda, el alcohol es como un amigo pesado: te diviertes, pero al día siguiente te arrepientes.

¿Qué planta es buena para dejar el alcohol?

Kudzu. Para el alcohol. ¿En serio? Nunca lo hubiera pensado.

Raíz de Kudzu. Té… Hervir agua… Añadir raíz seca. Suena fácil. Demasiado fácil. ¿De verdad funciona? Tendré que investigar más. Ayer mismo vi una enredadera enorme, ¿sería kudzu? Me pregunto si la podría usar.

Reducir el deseo de beber. Eso es lo que necesito. Este año he bebido demasiado. Sobre todo cerveza. Y vino en las cenas. Demasiadas cenas. Debería controlar más. Quizás este té me ayude.

• Comprar raíz de kudzu.
• Hervir agua.
• Añadir la raíz.
• Beber.

Parece un plan. Simple. Lo intentaré. La semana pasada mi vecina, Elena, me habló de un remedio natural. No recuerdo qué era. Algo con hierbas. Pero esto del kudzu suena más… exótico. Siempre me ha gustado lo oriental. Recuerdo ese viaje a Japón en 2021. Increíble. Nada que ver con esto, claro. Pero bueno, a ver si el kudzu me ayuda con la cerveza. Mucha cerveza últimamente. Demasiada. Quiero dejarlo. O al menos beber menos. Quizás apuntarme al gimnasio también. Este año sí que sí. Ya lo dije el año pasado… Y el anterior.

Efectos del Kudzu:

• Reduce el deseo de alcohol.
• Medicina tradicional china.
• Se usa la raíz.

Uf, qué calor hace. Voy a por un vaso de agua. Mejor dos.

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