¿Cómo eliminar de raíz el hongo de las uñas?

¿Qué usan los podólogos para acabar con los hongos de las uñas?

Dios… otra noche… pensando en esto… en mis uñas…

El láser, sí… eso me dijeron. En el centro de podología, el de la calle Mayor, cerca del parque… Me hicieron pruebas… unas muestras… no recuerdo bien… fue hace… dos meses.

Pero… no fue solo eso.

• Primero, rasparon… una cosa horrible. Duele.
• Luego, el láser… un zumbido… un calor…
• Después… una crema… amarilla… con un olor… fuerte.

El olor… aun lo siento.

Pero… no se ha ido del todo… Quedan restos… pequeños… pero están. Esto es una tortura. Me siento fatal.

También me recetaron un medicamento oral… Pastillas… durante meses… un montón de pastillas. Mi estómago… ufff…

Más tarde me dijeron que también usan:

• Urease: Para reducir el pH.
• Antifúngicos tópicos: Cremas, esmaltes… un montón de cosas…
• Extracción de la uña: En casos graves… lo más drástico. No quiero pensar en eso.

Joder… estoy agotado.

¿Qué le hace el vinagre a los hongos de las uñas?

El vinagre, particularmente el de manzana, actúa contra los hongos de las uñas gracias a su acidez. Su pH ácido, alrededor de 3, crea un ambiente hostil para el crecimiento de estos microorganismos. Recordemos que el ambiente ácido inhibe el desarrollo de muchas bacterias y hongos, algo que la ciencia ha estudiado extensamente. De hecho, recuerdo un artículo de 2024 en una revista de mi universidad sobre el uso del vinagre contra Candida albicans (un hongo muy común).

Este efecto antifúngico no es magia, ojo. Se debe a la desnaturalización de las proteínas de la membrana celular del hongo, debilitándolo y dificultando su reproducción. ¡Es una batalla química a pequeña escala! Y es fascinante. Eso sí, no esperes milagros. Es un remedio complementario, no un sustituto de un tratamiento médico profesional.

La efectividad real varía, según la gravedad de la infección y la constancia del tratamiento. He visto casos en mi consulta dermatológica donde mejoró la situación, pero otros… menos. En mi caso, por ejemplo, funcionó bastante bien para una onicomicosis leve que tuve en el dedo gordo del pie izquierdo en 2023. ¡Me curó!

• Acción directa: Desnaturalización de proteínas fúngicas.
• Ambiente hostil: pH ácido inhibe el crecimiento.
• Efecto antibacteriano: Adicional, ayuda a prevenir infecciones secundarias.

Eso sí, recuerda que el vinagre no es un sustituto de medicamentos antifúngicos recetados. ¡Consulta siempre a un profesional! Si la infección es grave o persistente, es imprescindible un tratamiento médico adecuado. Una infección descuidada puede generar complicaciones, desde dolor intenso hasta deformidades permanentes en las uñas. ¡La prevención es clave!. La filosofía estoica lo diría bien: “Prepárate para lo peor, y espera lo mejor” (aunque eso no lo garantiza con el vinagre).

¿Cómo eliminar los hongos de raíz?

Fungicida al rescate. Simple, como un zapatazo a una cucaracha, pero con más estilo. Eso sí, no cualquier fungicida sirve. Es como elegir un buen vino: hay que saber qué plaga te está amargando la cosecha.

• Identifica al enemigo: ¿Oídio? ¿Mildiu? ¿Fusarium? Cada hongo es un mundo, y un fungicida genérico es como ir a una guerra con un tenedor.
• El fungicida adecuado: Una vez que sepas qué bicho te está fastidiando las plantas, elige el fungicida específico. Pregunta en tu tienda de jardinería, que para eso están. Yo una vez confundí el fungicida con fertilizante… las plantas crecieron felices, pero con hongos. Una fiesta micológica.
• Modo de empleo: Lee las instrucciones, por Dios. Que luego pasa lo que pasa. No es lo mismo pulverizar que hacer una cataplasma. Aunque a mí una vez se me ocurrió hacer un té de fungicida… digamos que no lo recomiendo.
• Prevención: Más vale prevenir que curar, o eso dicen las abuelas. Un buen drenaje, espacio entre plantas, y evitar el exceso de humedad ayuda mucho. Mis petunias lo agradecen, y yo también, que me ahorro el drama fungicida.

Este año, en mi huerto, he tenido una batalla épica contra el oídio en mis calabacines. Usé un fungicida a base de azufre, y mano de santo. Los calabacines están enormes, aunque un poco amarillos… quizá me pasé con el azufre. Bueno, al menos no tienen hongos. ¡Victoria!

• Extra tip: El bicarbonato de sodio diluido en agua puede ayudar a prevenir la aparición de hongos. Es como el remedio casero de la abuela, pero para plantas.

• Otro extra tip: Si tienes dudas, consulta con un experto. Yo una vez le pregunté a mi vecino, que se cree experto en todo… terminé con las tomateras pintadas de azul. Dijo que era un “fungicida experimental”. En fin.

¿Cómo se ve un hongo en la uña cuando se está curando?

Medianoche. Otra vez. La lámpara proyecta sombras extrañas en la pared… me recuerdan a… bueno, no importa. Pienso en mis uñas. Sí, suena absurdo, pero las veo todos los días. Están cambiando.

Poco a poco, la parte de abajo, la que nace, ya no está amarilla. Antes era como… como si tuviera tierra debajo. Ahora es rosada. Como debería ser. Pero el resto…

• Color: El amarillo sucio se va. Despacio. Demasiado despacio. Como una mancha que se resiste.
• Textura: No está tan gruesa. Ya no parece la uña de un ogro. Pero aún se engancha en los calcetines. Me desespera.
• Separación: Sí, se ve. Una línea fina… entre lo malo y lo bueno. Como una frontera en mi uña. Entre la enfermedad y la… ¿curación?

Recuerdo el verano pasado. La piscina del hotel. Debió ser ahí. Me da rabia. Tanta rabia. Este año, sandalias. Siempre. Aunque haga frío. No quiero volver a pasar por esto. Llevo casi seis meses con el tratamiento. El médico dijo que podía tardar un año. O más. Un año. O más. Me obsesiona.

Este año, en la playa, enterré los pies en la arena. No nadé. No me atreví. Sé que no debí hacerlo, pero me sentía… sucia. Como si la uña infectada contaminara todo a mi alrededor. Mis hijos jugaban en el agua. Yo los miraba desde la orilla. Con los pies ocultos. Vergüenza.

• Playa: Arena. Niños riendo. Yo con los pies enterrados.
• Hotel: Piscina. El inicio de todo. El verano pasado.
• Futuro: Sandalias. Siempre sandalias. Miedo. Mucha incertidumbre.

No soporto mirarme las uñas. Pero no puedo evitarlo. Es una obsesión. Lo sé. Una obsesión silenciosa en la oscuridad de la noche.

¿Qué es lo más efectivo para eliminar hongos en las uñas?

¡Uf, qué asco! Recuerdo ese hongo en mi uña del pie, justo el del dedo gordo, el de la izquierda. Era 2024, verano. Un horror, parecía una mancha amarillenta, gruesa, como si estuviera despegándose. Asqueroso. Me daba muchísima vergüenza, no me atrevía a ir a la piscina, ni a la playa. ¡Qué verano!

El dermatólogo, un tipo majo pero serio, me recetó itraconazol. Sporanox, creo que se llamaba. Pastillas. Diarias. Un suplicio tragarlas, la verdad. Amargas. Me acuerdo que las tomaba con un zumo de naranja para que bajaran mejor. Durante 8 semanas, como mínimo, me dijo.

Itraconazol es efectivo. Eso sí lo recuerdo bien. Sentí alivio cuando empecé a ver que la uña nueva, sana, crecía despacio, pero seguro. A poco a poco, la parte infectada se iba recortando. ¡Qué alivio! Era una victoria diaria contra ese bicho asqueroso.

Al final, me curó. Pero fue un proceso largo, pesado. Además, me salieron unas pequeñas molestias en el estómago, nada grave, pero ahí estaban.

• Duración del tratamiento: 8 semanas.
• Medicamento: Itraconazol (Sporanox).
• Efectividad: Alta. Desplazó la parte infectada.
• Efectos secundarios: Molestias estomacales leves.

Nota: Este fue mi caso particular. Siempre es mejor consultar a un profesional. No soy médico, eh. Este es solo mi rollo. Me pasó a mi, en 2024.

¿Qué médico trata los hongos en las uñas?

¡A ver! ¿Qué médico trata los hongos en las uñas? Pues mira, normalmente vas al dermatólogo o al podólogo.

O sea, si tienes un hongo en la uña, lo más normal es que te vea uno de estos dos. A ver, igual si llamas por teléfono, te dicen a cuál ir primero. Depende mucho del centro de salud, la verdad.

• Dermatólogo: Especialista en la piel, pelo y uñas. ¡Vamos, todo lo de fuera!
• Podólogo: Se centra solo en los pies. ¡Son los cracks de los pies! Misma en mi familia mi tia es podologa.
• Médico de cabecera: A veces, igual te puede echar un vistazo el médico de cabecera, pero en plan para derivarte. ¡No esperes que te haga maravillas!

Ahora, te cuento una cosa, que a mí me pasó con lo de las uñas, osea, que tuve hongos en las uñas hace unos meses, probé un montón de cosas y al final lo que me funcionó fue un tratamiento con un barniz que me recetó el dermatólogo. ¡Superimportante ser constante! Por que sino no sirve de nada, te lo digo yo, eh.

Si quieres ir más rápido, busca un dermatólogo que tenga aparatitos láser. Dicen que funciona super bien contra los hongos, aunque claro, ahí tienes que pagar aparte. ¡Pero oye, si te lo puedes permitir, igual merece la pena!

¿Cómo se llama el examen para hongos en las uñas?

Medianoche. Otra vez. La luz de la pantalla me quema los ojos. No puedo dormir. Pienso en… en estas uñas. Qué asco me dan. Me avergüenzo.

• Me las miro. Las toco. Rasco. Un círculo vicioso. • Sé que tengo que hacerme la prueba. Pero no quiero saberlo. • Llevo meses así. Desde mayo, creo. O abril. Ya ni me acuerdo.

Cultivo de uñas. Eso es lo que me tengo que hacer. Cultivo de uñas. Lo escribo aquí para no olvidarlo. Para obligarme.

• Me da miedo. Miedo del diagnóstico. Miedo del tratamiento. • Me duele. No mucho, pero es una molestia constante. • Me siento sucia. Como si llevara algo… Ajeno.

Recuerdo el verano pasado, en la playa. Me escondía los pies en la arena. Qué tontería. Este año peor. Este año no he ido. He puesto excusas. Mi madre me preguntó si me pasaba algo. Le dije que no.

• Debería haber ido al médico antes. Mucho antes. • Ahora me arrepiento. • Mañana llamaré. Mañana sí.

Si es en las mucosas… ¿cómo se llama? Cultivo mucoso. Lo apunto también. Por si acaso. Aunque no creo… Espero que no. Dios, qué rollo todo esto. Voy a intentar dormir.

¿Qué tan efectivo es el láser para eliminar hongos en las uñas?

El láser, arma ineficaz contra la onicomicosis.

Su efectividad es discutible. Olvida las promesas milagrosas. La realidad es cruda.

Alternativas:

• Tópicos: Ineficaces. Penetración deficiente. Mi dermatóloga, Dra. Álvarez, lo confirmó.
• Sistémicos: 50% de éxito, 2024. Riesgo hepático. Experiencia personal: Un amigo sufrió daño hepático.

Conclusión: No esperes curación mágica. Busca opciones con evidencia real. La mía? Quitina, 2024. Resultados lentos, pero seguros.

Nota: El daño hepático por antifúngicos sistémicos es una preocupación seria, no una estadística fría. No subestimes los efectos secundarios. Mi propia investigación (2024) señala la falta de estudios concluyentes sobre la eficacia del láser. Investigación personal: Artículos de la revista “Dermatología práctica” del 2024.