¿Qué amenazas tiene el ciberespacio?

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Uf, ¡qué miedo da pensar en el ciberespacio! Para mí, la mayor amenaza es la vulnerabilidad que sentimos. Es como estar a la intemperie, expuestos a malware que se cuela sigilosamente, a manipulaciones emocionales con la ingeniería social, y ni hablar de esos ataques que aprovechan cada error en las apps que usamos a diario. Me da rabia pensar que alguien pueda aprovecharse así de la tecnología. ¡Es una lucha constante!

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¿Qué amenazas tiene el ciberespacio? Uf, pensar en ello me da escalofríos, de verdad. ¿Quién no se siente vulnerable ahí fuera, navegando en esa inmensidad digital? A mí, lo que más me asusta, lo que de verdad me quita el sueño a veces, es la sensación de indefensión. Es como caminar por la calle de noche, solo, sabiendo que hay peligros acechando… pero en el ciberespacio, esos peligros son invisibles, escurridizos, como fantasmas.

Malware que se cuela sin que te des cuenta… ¿cómo te puedes proteger realmente? Recuerdo una vez, hace unos meses, que mi ordenador se volvió loco. Empezó a ir lento, a abrir ventanas extrañas, y casi me da un infarto. Al final, fue un virus, ¡pero qué susto! Tuve que formatearlo todo, perdí fotos de mi abuela, cosas importantes… eso te marca, ¿sabes?

Y luego está la ingeniería social, esa manipulación tan sutil… ¡qué astutos son! Recuerdo un email que me llegó, parecía de mi banco, pidiendo datos. Por suerte, me di cuenta, pero me da miedo pensar en la gente que cae. ¿Cuántos habrán perdido su dinero, su identidad, por culpa de un email falso? Es una barbaridad.

Y no me digas de las apps… ¿quién no ha visto alguna notificación rara, alguna app que pide permisos excesivos? ¡Yo las miro con lupa! Porque, mira, yo no soy experta en informática, ni mucho menos, pero ya he leído que… bueno, que se estima que el 70% de los ataques se hacen aprovechando alguna vulnerabilidad en las aplicaciones. ¡El setenta por ciento! ¿Te lo imaginas? Es una locura. Una lucha diaria contra los malos, una batalla incesante contra la vulnerabilidad. Y a veces, te sientes tan pequeño, tan indefenso… pero hay que seguir luchando, ¿no crees? Porque al final, el ciberespacio, a pesar de todo, es un lugar increíble, lleno de oportunidades… pero también de peligros que debemos aprender a esquivar.