¿Qué tan frío es el lado oscuro de la luna?

El frío extremo del lado oscuro de la Luna

El lado oscuro de la Luna, también conocido como el lado oculto, presenta un entorno inhóspito y helado marcado por temperaturas extremadamente bajas. Al no recibir radiación solar directa, esta región experimenta un frío abrasador.

Temperaturas escalofriantes

Las temperaturas en el lado oscuro de la Luna pueden descender hasta -170°C (-274°F). Esta cifra representa un frío extraordinario, más allá de los niveles que se experimentan en la Tierra. Tales temperaturas son lo suficientemente frías como para congelar dióxido de carbono y otros gases en estado sólido.

Investigaciones recientes

En los últimos años, las misiones espaciales han proporcionado información valiosa sobre las condiciones del lado oscuro de la Luna. En particular, la misión Change de la agencia espacial china ha profundizado en la comprensión de las temperaturas de esta región.

El orbitador de Change estaba equipado con un termómetro infrarrojo que midió las temperaturas de la superficie lunar. Los datos recopilados revelaron que las temperaturas del lado oscuro eran significativamente más frías que las del lado iluminado por el sol, a veces alcanzando mínimos de -183°C (-297°F).

Implicaciones para la exploración

Las bajas temperaturas del lado oscuro de la Luna plantean desafíos significativos para la exploración espacial. Las naves espaciales y los astronautas deben estar equipados con sistemas de control térmico robustos para soportar las condiciones extremas.

Además, la presencia de gases congelados en estado sólido en el lado oscuro sugiere que podría albergar recursos valiosos, como el agua y el oxígeno. Sin embargo, extraer y utilizar estos recursos en el entorno helado sería una tarea formidable.

Conclusión

El lado oscuro de la Luna es un lugar fascinante y misterioso que alberga condiciones extremas. Sus bajas temperaturas, que descienden hasta -170°C, lo convierten en una de las regiones más frías del sistema solar. Las investigaciones continuas, como la misión Change, están brindando nueva información sobre este entorno único, abriendo posibilidades para futuras exploraciones y descubrimientos.