¿Qué temperatura hace en el lado oscuro de la Luna?

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La ausencia de luz solar en el lado oscuro de la Luna crea temperaturas extremadamente bajas, por debajo de los -170°C.
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El lado oscuro de la Luna: Un frío abismal

El lado oscuro de la Luna, la parte que permanece constantemente oculta a la Tierra, es un lugar de temperaturas extremas. Al carecer de la luz solar directa, esta cara de la Luna experimenta temperaturas increíblemente bajas que pueden descender hasta cifras inferiores a los -170 °C.

La ausencia de luz solar

La luz solar es la principal fuente de calor en nuestro sistema solar. El lado iluminado de la Luna, que se orienta hacia el Sol, absorbe la radiación y se calienta a temperaturas de hasta 127 °C. Sin embargo, el lado oscuro de la Luna no recibe luz solar directa y, por tanto, está desprovisto de esta fuente de calor.

Radiación infrarroja y enfriamiento

Aunque el lado oscuro de la Luna no recibe luz solar, sí emite radiación infrarroja. Esta radiación es una forma de calor que se produce como resultado del enfriamiento de la superficie lunar. El espacio es un vacío, lo que significa que no hay aire para atrapar el calor. Por tanto, la radiación infrarroja emitida desde el lado oscuro de la Luna se escapa al espacio, provocando un enfriamiento continuo.

Implicaciones científicas

Las temperaturas extremas en el lado oscuro de la Luna tienen implicaciones científicas importantes. Estas condiciones de frío intenso pueden afectar a la composición y estructura de los minerales lunares. Los estudios de estos minerales pueden proporcionar información sobre la historia y evolución de la Luna y el sistema solar.

Además, las temperaturas extremas del lado oscuro de la Luna presentan desafíos para futuras misiones de exploración lunar. Los instrumentos y equipos deben diseñarse para soportar las condiciones de frío extremo para poder operar con eficacia.

Conclusión

El lado oscuro de la Luna es un lugar de temperaturas extremas, con cifras que pueden descender hasta los -170 °C. Esta ausencia de luz solar crea un entorno único y desafiante que ofrece oportunidades para la investigación científica y plantea cuestiones para futuras misiones de exploración.