¿Cómo medir 5 gramos sin balanza?

¡Ay, cómo odio no tener una balanza a mano justo cuando la necesito! ¿A quién no le ha pasado? Necesitas 5 gramos de algo, y te quedas ahí, mirando la despensa con cara de “¿y ahora qué?”. Pues, déjame contarte un truquito que me ha salvado más de una vez. Sin balanza, la solución mágica (o casi mágica) es la humilde cuchara. Sí, esa que usas para el café, la sopa, ¡de todo!

Mira, la cosa es así: una cucharada sopera bien llena, hasta arriba, de esas que casi se te cae todo por el camino, son unos 14 gramos. ¿Ves? ¡Un montón! Pero si la llenas y luego le pasas un cuchillo por encima, dejándola rasa, se queda en unos 10 gramos. Y aquí viene lo bueno: una cucharadita de café, de las pequeñitas, son aproximadamente 3 gramos.

Entonces, ¿cómo llegamos a los 5 gramos que necesitamos? Pues… un poquito de lógica, ¿no? Una de café son 3… Si le añades media cucharadita más, ¡tachán! Aproximadamente 5 gramos. A ver, no es una ciencia exacta, lo admito. Yo, por ejemplo, la otra vez necesitaba 5 gramos de levadura para un bizcocho, y usé este método. El bizcocho, a pesar de mi “medición a ojo”, ¡quedó de maravilla! Claro, si necesitas una precisión milimétrica, pues… a comprar una balanza. Pero para la cocina del día a día, para esas recetas que no requieren tanta exactitud, este truco con las cucharas es una maravilla. ¿No te parece? Es como esos pequeños secretos de la abuela que te salvan la vida. Y a mí, sinceramente, me encanta.