¿Cuándo se considera bajo en sodio?

¿Cuándo se considera bajo en sodio?

El sodio es un mineral esencial para el cuerpo humano, pero el consumo excesivo puede provocar problemas de salud como presión arterial alta, enfermedades cardiovasculares y derrames cerebrales. Es importante controlar la ingesta de sodio para mantener una salud óptima.

Los alimentos se clasifican como “bajos en sodio” cuando cumplen con los siguientes criterios establecidos por la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA):

• Porciones de 50 gramos o menos: Contienen 140 miligramos o menos de sodio por porción.
• Porciones mayores de 50 gramos: Contienen 20 miligramos o menos de sodio por 100 gramos.

También se puede utilizar el Valor Diario (VD) recomendado para determinar si un alimento es bajo en sodio:

• Cuando una porción de un alimento contiene un 5% o menos del VD de sodio, se considera bajo en sodio.

El VD para el sodio es de 2.300 miligramos por día para adultos. Esto significa que un alimento con 115 miligramos de sodio por porción o menos se considera bajo en sodio.

Beneficios de los alimentos bajos en sodio:

• Reducen el riesgo de presión arterial alta y enfermedades cardiovasculares.
• Ayudan a mantener un peso saludable al reducir la retención de líquidos.
• Mejoran la función renal y previenen la formación de cálculos renales.

Elegir alimentos bajos en sodio:

• Lea las etiquetas de los alimentos cuidadosamente y elija aquellos que tengan una cantidad baja de sodio.
• Cocine comidas caseras más a menudo para controlar la cantidad de sodio que agrega.
• Utilice hierbas, especias y cítricos para darle sabor a los alimentos en lugar de sal.
• Reduzca el consumo de alimentos procesados, que suelen ser altos en sodio.
• Elija alternativas bajas en sodio a los alimentos habituales, como salsas sin sal añadida o cecina baja en sodio.

Es importante tener en cuenta que incluso los alimentos bajos en sodio pueden contribuir a la ingesta diaria de sodio. Es esencial seguir una dieta equilibrada y limitar el consumo general de sodio para mantener una salud óptima.