¿Cuánto tiempo después de la fecha de caducidad se puede consumir un alimento?

Vale, a ver… la fecha de caducidad… ¡Ay, la eterna pregunta! ¿Cuántas veces me he encontrado en la cocina, con ese paquete de galletas mirándome fijamente, y la fecha de caducidad ya pasada? ¿Tirarlo? ¿Arriesgarme?

Si el paquete está cerrado y lo he guardado bien, generalmente me digo, “Bueno, igual no es tan malo”. Y es que, a ver, la “fecha de consumo preferente” no es lo mismo que “¡a la basura inmediatamente!”, ¿verdad? Es más como una sugerencia de cuándo estará en su mejor momento, supongo.

He leído por ahí que, dependiendo de la comida, ¡puede durar hasta un año más! ¿Un año? ¡Madre mía! Pero claro, ahí entra en juego el sentido común, ese que a veces nos falla… ¿Recuerdan esa lata de atún que encontré al fondo de la despensa? La abrí y… ¡uf! El olor me echó para atrás. ¡Ni loca me la comía! Aspecto, olor, textura… esas son las claves. Si algo se ve raro, huele raro o tiene una textura sospechosa, mejor no jugársela.

Y bueno, a veces me pregunto si todo este tema de las fechas de caducidad no es un poco cosa de las empresas para que compremos más, ¿no creen? Porque, a ver, mi abuela se comía cosas que yo, solo de pensarlo, ya me daría un retortijón, ¡y vivió hasta los noventa!

En fin, creo que la clave está en usar la cabeza. Confiar en nuestros sentidos. Y quizás, de vez en cuando, arriesgarse un poquito con esas galletas de hace una semana. ¿Qué es lo peor que puede pasar? (Bueno, no me respondan a eso… prefiero no saberlo). 😅

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