¿Por qué mis intestinos hacen mucho ruido?

1 ver

¡Ay, esos ruidos! A mí también me pasa, y a veces me da hasta vergüenza. Creo que es normal, sobre todo después de una comida copiosa o si estoy un poco suelto. Es esa sensación de que todo se mueve ahí dentro, como una fiesta en mi barriga. Aunque a veces me preocupa, supongo que es simplemente mi sistema digestivo trabajando a tope. Si es constante o muy fuerte, sí que iría al médico, pero normalmente lo achaco a una digestión activa.

Comentarios 0 gustos

¿Por qué mis intestinos hacen tanto ruido? ¡Uf! Dime algo que no sepa… A veces parece que llevo una orquesta de percusión dentro, ¿verdad? Es como… ¿es que solo me pasa a mí? No creo, ¿no? A mí me da una vergüenza tremenda a veces, sobre todo si estoy en una reunión importante o en el cine, en silencio total. ¡Justo entonces mi estómago decide dar un concierto de gorgoteos!

Es que de verdad, a veces pienso, “¿pero qué estará pasando ahí dentro?”. Como si hubiera una fiesta de burbujas y yo no estoy invitada. Sobre todo después de comer mucho, ¿a que sí? Por ejemplo, el otro día me comí una fabada asturiana… ¡Madre mía! Parecía que tenía una tribu de gremlins haciendo la digestión por mí. O si estoy nerviosa, también. Exámenes, entrevistas… ¡mi estómago lo delata todo!

También me pasa si como algo que no me sienta bien. Recuerdo una vez que probé un plato exótico en un restaurante… ¡mejor no recordarlo! Mi pobre barriga sonaba como una ballena varada. Aprendí la lección: a veces lo simple es mejor. Un buen plato de lentejas y tan ricamente.

He leído por ahí, no sé dónde, que es normal que los intestinos hagan ruido. Algo de los movimientos peristálticos, creo que se llama. No me preguntes qué es exactamente, pero vamos, que es el intestino haciendo su trabajo, moviendo la comida. Supongo que si no hiciera ruido sería peor, ¿no? Sería como… ¿un coche sin motor?

En fin, que si el ruido es constante, muy fuerte, o te duele, pues claro, mejor ir al médico. Pero si es como lo mío, un concierto ocasional de gorgoteos, pues no creo que sea nada grave. A vivir con la banda sonora, digo yo. Aunque a veces me gustaría bajarle el volumen, ¡qué le vamos a hacer!