¿Qué no debo tomar si tengo urticaria?

Urticaria: Qué evitar para no empeorar los síntomas

La urticaria, caracterizada por ronchas rojas y con picazón en la piel, puede ser un trastorno incómodo e incluso preocupante. Si bien existen tratamientos para aliviar los síntomas, ciertos medicamentos y hábitos pueden exacerbar la condición, prolongando el malestar y complicando el proceso de recuperación. Conocer qué evitar es crucial para controlar los brotes y mejorar la calidad de vida.

Uno de los aspectos más importantes a considerar es la medicación. Algunos analgésicos de venta libre, aunque aparentemente inocuos, pueden empeorar la urticaria o desencadenar reacciones adversas. La aspirina y la codeína, por ejemplo, son dos medicamentos que deben evitarse absolutamente durante un brote de urticaria o angioedema (hinchazón profunda de la piel). Su consumo puede aumentar la inflamación y la severidad de los síntomas, prolongando el tiempo de recuperación.

Para el alivio del dolor asociado a la urticaria, existen alternativas seguras y efectivas. El paracetamol, disponible bajo diversas marcas como Gelocatil o Termalgin, es una opción recomendada. Actúa sobre el dolor y la fiebre sin interactuar negativamente con los mecanismos inflamatorios que causan la urticaria. Es importante seguir las indicaciones del prospecto y consultar a un farmacéutico en caso de dudas sobre la dosis adecuada.

Sin embargo, es fundamental recordar que esta información no sustituye la consulta médica. El paracetamol puede ser una solución temporal para el alivio sintomático, pero no trata la causa subyacente de la urticaria. Si los síntomas persisten, empeoran o se acompañan de otros signos como dificultad para respirar, hinchazón de la garganta o mareos, es imperativo buscar atención médica inmediata. Un profesional de la salud podrá realizar un diagnóstico preciso, determinar la causa de la urticaria (que puede variar desde alergias alimentarias hasta reacciones a medicamentos o enfermedades autoinmunes) y recomendar el tratamiento más apropiado.

Además de evitar ciertos medicamentos, llevar un diario de alimentos puede ser útil para identificar posibles desencadenantes. Muchos alimentos, como frutos secos, mariscos o lácteos, pueden provocar reacciones alérgicas que se manifiestan como urticaria. Evitar el contacto con sustancias irritantes para la piel, como ciertos tejidos o jabones perfumados, también puede contribuir a minimizar los síntomas.

En resumen, el manejo efectivo de la urticaria requiere un enfoque integral que incluya la evitación de medicamentos como la aspirina y la codeína, la utilización de analgésicos seguros como el paracetamol y, sobre todo, la consulta médica para un diagnóstico y tratamiento adecuados. No se automedique y priorice su salud consultando a un profesional ante cualquier duda o empeoramiento de los síntomas.