¿Qué tipo de sal es más beneficiosa para la salud?

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Aunque la sal marina se publicita como más saludable, nutricionalmente es similar a la sal de mesa refinada. Ambas contienen esencialmente la misma cantidad de sodio por peso, por lo que sus beneficios para la salud son comparables, desmintiendo la percepción de superioridad de la sal marina.
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La sal: ¿Marina o de mesa, cuál es más saludable?

La sal es un mineral esencial que desempeña un papel fundamental en la función corporal. Sin embargo, el consumo excesivo de sodio, el componente principal de la sal, puede provocar problemas de salud como hipertensión y enfermedades cardíacas.

Ha habido mucho debate sobre qué tipo de sal es más beneficiosa para la salud: la sal marina o la sal de mesa refinada. La sal marina se ha promocionado ampliamente como una opción más saludable debido a su supuesta mayor concentración de minerales.

Sin embargo, investigaciones recientes han demostrado que esta percepción es errónea. Nutricionalmente, la sal marina y la sal de mesa refinada son muy similares. Ambas contienen esencialmente la misma cantidad de sodio por peso.

Contenido de sodio comparable:

Tanto la sal marina como la de mesa refinada contienen aproximadamente 400 mg de sodio por cucharadita. Esto significa que, gramo por gramo, no hay una diferencia significativa en el contenido de sodio entre los dos tipos de sal.

Beneficios para la salud comparables:

Como resultado de su contenido de sodio similar, los beneficios para la salud de la sal marina y la sal de mesa refinada son comparables. No hay evidencia científica que respalde la afirmación de que la sal marina es más saludable para el corazón o tiene otros beneficios para la salud.

Conclusión:

La percepción de que la sal marina es superior a la sal de mesa en términos de salud no está respaldada por evidencia científica. Ambas contienen cantidades similares de sodio, por lo que sus impactos en la salud son esencialmente los mismos.

Los consumidores deben ser conscientes del consumo excesivo de sodio, independientemente del tipo de sal que elijan. Es aconsejable limitar la ingesta de sodio a menos de 2.300 mg por día para adultos sanos, según las pautas de la Organización Mundial de la Salud (OMS).