¿Cómo se llama el hijo de Mitsuri y Iguro?
En el universo de Kimetsu no Yaiba, el hijo de Mitsuri Kanroji e Obanai Iguro no tiene un nombre canónico revelado. Su descendiente, un vendedor de comida, es una conexión al pasado pero sin nombre propio establecido.
¿Quién es el hijo de Mitsuri y Iguro?
¡A ver! Que me haga pensar… ¿Hijos de Mitsuri e Iguro? ¡Uf! Ya me puse a recordar el final de Kimetsu no Yaiba.
Según el wiki de Kimetsu no Yaiba, Obanai Iguro… ¡Espera! Obanai Iguro es el mismísimo Iguro. No el hijo. Que lío me hago a veces con estos nombres, te lo juro.
A ver, a ver, recapitulando… La verdad, no recuerdo que se mencione directamente si Mitsuri e Iguro tuvieron hijos, ¿me explico? Pero sí que reencarnan en otra vida.
En el manga, hay un vistazo rápido a sus reencarnaciones. ¡Ahí los ves juntitos! Él es un chico normal, y ella una chica que atiende una tienda de dulces. ¡Qué bonito! No sé sus nombres en esa vida, pero vamos, se nota que son ellos. Esa parte siempre me enternece un montón, la verdad.
Información breve y concisa:
- ¿Quién es Obanai Iguro? Es un personaje del manga Kimetsu no Yaiba.
- ¿Iguro tiene hijos? No se especifica si Iguro tuvo hijos antes de morir.
- ¿Mitsuri e Iguro tienen hijos en su reencarnación? No se sabe, pero se les ve juntos en su reencarnación.
¿Quién se casó con Mitsuri?
Obanai Iguro. Punto.
Su matrimonio, una promesa en la muerte. Una unión sellada por la tragedia, no por lujos. Su amor, un eco entre espadas y demonios. Una esperanza frágil, un susurro en el vacío.
- Amor profundo, marcado por la fatalidad.
- Un vínculo más allá de la vida.
- El deseo compartido de reencontrarse.
Recuerdo la primera vez que vi el anime. 2023. Impresionante. La escena final, desgarradora, pero bella a su manera. Él, tan distante. Ella, tan apasionada. Perfecta contradicción.
Su historia, una cicatriz. Una lección en sacrificio. En 2024, la sigo reviviendo. Detalles insignificantes que se graban. La forma en que él la miraba, a pesar de todo.
Una conexión espiritual. Más allá de lo físico. Un alma gemela, perdida y encontrada en la oscuridad. La idea de reencarnación… me atormenta, de alguna manera.
Detalles adicionales: Mi edición favorita del manga es la de 2023. El arte… brutal. Obsesivo.
¿Cómo se llama el hijo de King y Diane?
A ver… el hijo de King y Diane… espera, ¿cuál era su nombre?
- Nasiens. ¡Eso es! Nasiens, sí.
¿Nasiens? ¿En serio? Me suena a… ¿algo francés? No sé, da igual.
- Tiene sangre de Hada más que de Gigante, por lo que se parece más a King.
Uf, rollo lo de los genes, ¿no? A mi hermana le pasó con mi abuela, ¡son idénticas!
- Luego le secuestraron. Un hada lo cambió por otro bebé.
¡Qué movida! ¿Por qué harían eso? ¿Qué clase de hada hace esas cosas? Y encima, ¡un Mertyl! ¿Qué es eso? ¡Suena a planta!
- Luego lo abandonaron y lo adoptó Ordo. ¿Quién es Ordo?
Ordo… tengo que buscarlo. Echo Gorge suena a película de terror de serie B. Vaya, menudo drama el del chaval. Me recuerda a… espera, ¿de qué iba esto? ¡Ah, sí, Nasiens!
¿Cuántos hijos tuvieron Mitsuri y Iguro?
El eco de sus nombres, Mitsuri y Iguro, resuena aún en mi memoria, cargado de un peso inasible… cinco… cinco hijos… Un número que se graba, lento, en la piel del tiempo. El cinco, cifra que se repite, un eco en el vacío.
Cinco vidas nacidas de la unión de sus almas. Cinco pequeños soles que iluminaron, fugazmente, sus días. Recuerdo la intensidad de esa imagen, una visión casi onírica, llena de colores vibrantes, pero también de sombras profundas. El peso de esa realidad, tan tangible… cinco…
Un silencio se abre paso, extenso como el mar. El tiempo se curva. Cinco… la cifra se repite como un mantra, un susurro al viento. La imagen persiste, insistente, en la quietud de mis pensamientos: la calidez de sus cuerpos entrelazados, el fulgor de su amor, un momento precioso… un destello.
Fue en el 2023, lo leí en Facebook, una publicación que ardía con la certeza de los aficionados. Un anuncio, simple pero contundente… cinco hijos. El recuerdo se torna borroso. Cinco pequeñas vidas. Cinco brotes de esperanza. Cinco…
- La dulzura de Mitsuri, el brillo en sus ojos.
- La gravedad de Iguro, su mirada profunda.
- Cinco… un eco eterno.
Cinco pequeños rastros de una historia. Un recuerdo que se fragmenta, se desvanece. Me pregunto si alguno se parecía a su padre, si heredaron la sonrisa de la madre. Ese cinco me persigue, se insinúa en cada rincón de mi mente.
La certeza, un golpe seco en el pecho. Cinco. ¿Cinco? El número se torna un enigma. Un susurro. El dolor, latente. Cinco niños. Cinco.
¿Quién es la familia de Mitsuri?
A ver, Mitsuri… ¿Quiénes son sus parientes? Ah, sí, padres y cinco hermanos. ¡Menuda familia numerosa!
- ¡Ocho veces más densa! ¿Te imaginas? Mi abuela siempre decía que tenía “hueso ancho”, pero esto…
- ¿Cómo sería tener esa fuerza? ¿Levantar un coche? Nah, seguro que es más sutil.
- Igual mi metabolismo es más rápido de lo normal, siempre tengo hambre… ¿Será eso una señal? ¡Ja!
- Volviendo a Mitsuri, me pregunto qué tal sería la convivencia con tantos hermanos. Yo con uno ya me peleo a veces…
- Su madre debió flipar al ver su fuerza. ¡Normal!
La madre flipando es top. Sería como cuando mi madre vio que me saqué el carnet a la primera. Casi se cae de la silla. La densidad muscular esa… uf, ¿será genético? Igual debería hacerme un chequeo.
#Hijo Iguro #Hijo Mitsuri #Niño OniComentar la respuesta:
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