¿Por qué Muzan no le tiene miedo a Kokushibo?

La Calma Indiferencia de Muzan hacia Kokushibo: Por Qué el Señor Demonio no Temía a Su Lunar Superior

Muzan Kibutsuji, el inescrutable señor supremo de los demonios, albergaba un desprecio absoluto por su Lunar Superior número uno, Kokushibo. A diferencia de su temor palpable hacia otros miembros de las Doce Lunas Demoníacas, Muzan veía a Kokushibo como un aliado potencial, no como una amenaza.

Perspectiva de Alianza

Muzan reconocía la extraordinaria fuerza de Kokushibo y su dominio de la técnica de Respiración Lunar. Vio en estas habilidades una ventaja que podría explotar para sus propios fines. Al ofrecerle la inmortalidad demoníaca, Muzan pretendía asegurar la lealtad de Kokushibo y eliminar cualquier amenaza percibida.

Eliminación de Amenazas

Muzan era plenamente consciente de la inmensa sed de sangre de Kokushibo y su desprecio hacia los humanos. Al convertirlo en un demonio, Muzan despojaría a Kokushibo de su humanidad, atenuando potencialmente su peligro.

Control Absoluto

La inmortalidad demoníaca le otorgaría a Muzan un control absoluto sobre Kokushibo. Podría manipularlo y dirigir su poder según su voluntad, consolidando su posición como señor supremo indiscutible.

Indiferencia hacia el Peligro

Además de sus cálculos estratégicos, Muzan poseía una profunda indiferencia hacia el peligro. Su propia inmortalidad y poder abrumadores lo hacían prácticamente inmune al miedo. Veía a Kokushibo como un mero peón en su juego de dominio, alguien que podía ser descartado fácilmente cuando ya no fuera útil.

Conclusión

La calma indiferencia de Muzan hacia Kokushibo no fue un signo de debilidad, sino una manifestación de su astuta estrategia. Al considerarlo un aliado potencial y eliminar cualquier amenaza percibida, Muzan aseguró su lealtad y consolidó su posición como señor supremo supremo del mundo demoníaco.