¿Qué es el desarrollo según la OMS?

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Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el desarrollo es un proceso integral de maduración que comprende las dimensiones física, biológica, psicológica y social del ser humano. Implica un crecimiento y evolución constantes en todas estas áreas, contribuyendo al bienestar y capacidad funcional del individuo a lo largo de su vida.

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Más allá del crecimiento: El desarrollo humano según la OMS

La Organización Mundial de la Salud (OMS) concibe el desarrollo como algo mucho más amplio que el simple crecimiento físico. No se trata solo de aumentar de estatura o peso, sino de un proceso holístico y dinámico que abarca la totalidad del ser humano. Para la OMS, el desarrollo representa una compleja interacción entre la maduración física, biológica, psicológica y social, un entramado de transformaciones continuas que moldean la capacidad del individuo para interactuar con el mundo y alcanzar su máximo potencial.

Este enfoque integral destaca la interdependencia de las diferentes dimensiones. El desarrollo físico, que incluye el crecimiento corporal y la adquisición de habilidades motoras, se ve influenciado y, a su vez, influye en el desarrollo cognitivo, emocional y social. Un niño con desnutrición, por ejemplo, puede experimentar retrasos en su desarrollo físico y cognitivo, afectando su capacidad de aprendizaje y su interacción social.

La dimensión biológica del desarrollo, relacionada con los procesos fisiológicos y genéticos, proporciona la base sobre la cual se construyen las demás dimensiones. La maduración del sistema nervioso, por ejemplo, es crucial para el desarrollo cognitivo y el aprendizaje.

El desarrollo psicológico, por su parte, abarca la evolución de las funciones cognitivas, como la memoria, la atención y el lenguaje, así como el desarrollo emocional y la formación de la personalidad. La capacidad de regular las emociones, resolver problemas y establecer relaciones interpersonales saludables son aspectos clave de esta dimensión.

Finalmente, el desarrollo social se refiere a la integración del individuo en su entorno social y cultural. Aprender las normas sociales, desarrollar habilidades de comunicación y construir relaciones significativas son componentes esenciales de esta dimensión. La interacción con la familia, la escuela y la comunidad juega un papel fundamental en el desarrollo social del individuo.

La OMS, al enfatizar la integralidad del desarrollo, resalta la importancia de abordar las necesidades de las personas en todas estas dimensiones a lo largo de su ciclo vital, desde la infancia hasta la vejez. Promover la salud, la educación, la equidad y la inclusión social son estrategias cruciales para facilitar un desarrollo humano pleno y contribuir al bienestar de las poblaciones. En definitiva, la visión de la OMS sobre el desarrollo trasciende la mera ausencia de enfermedad y se centra en la construcción de una vida plena, donde cada individuo pueda alcanzar su máximo potencial y contribuir a la sociedad.