¿Qué palabras usar para un objetivo general?

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Para definir objetivos generales, utiliza verbos como analizar, comparar, crear, describir, desarrollar, identificar, evaluar, diseñar, formular, proponer, o demostrar. Estos verbos indican la acción a realizar.
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Definir objetivos generales: más allá de las palabras vacías

Establecer objetivos generales claros y concisos es fundamental para cualquier proyecto, investigación o plan de acción. No basta con enunciar propósitos vagos. Se requiere una precisión que asegure la dirección y el seguimiento del proceso. La clave reside en elegir los verbos adecuados para expresar la acción que se pretende llevar a cabo.

A menudo, se comete el error de utilizar frases genéricas como “comprender”, “conocer” o “estar familiarizado con”. Estas expresiones, aunque no incorrectas, carecen de la especificidad necesaria para guiar el trabajo y evaluar su progreso. En cambio, verbos fuertes, concretos y accionables son esenciales para definir objetivos generales sólidos.

¿Qué verbos utilizar?

La clave está en seleccionar verbos que expresen una acción precisa y medible. A continuación, se presentan algunos verbos útiles, agrupados por tipo de acción, para ayudarte a formular objetivos generales efectivos:

Para análisis y comprensión:

  • Analizar: Explorar a fondo un tema o situación para identificar sus componentes y relaciones. Ej: Analizar la evolución del mercado de energías renovables en los últimos 5 años.
  • Comparar: Examinar similitudes y diferencias entre dos o más elementos. Ej: Comparar los diferentes modelos de gestión de residuos en distintas ciudades.
  • Evaluar: Valorar el mérito, la importancia o la calidad de algo. Ej: Evaluar la efectividad de los programas de educación ambiental en diferentes colegios.
  • Identificar: Reconocer y señalar aspectos concretos. Ej: Identificar las causas principales del incremento de la inflación.

Para la creación y el diseño:

  • Crear: Generar algo nuevo o diferente. Ej: Crear un plan de marketing digital para la promoción de un nuevo producto.
  • Desarrollar: Expandir, mejorar o perfeccionar algo existente. Ej: Desarrollar un prototipo de sistema de alerta temprana ante desastres naturales.
  • Diseñar: Planificar y proyectar algo. Ej: Diseñar un nuevo modelo de curriculum para la formación profesional.
  • Proponer: Presentar una solución o idea. Ej: Proponer un plan de acción para mejorar la eficiencia energética en una empresa.
  • Formular: Expresar con precisión un concepto o idea. Ej: Formular una hipótesis sobre las causas de la deserción escolar.

Para la demostración y la validación:

  • Demostrar: Evidenciar o probar algo con pruebas y datos. Ej: Demostrar la eficacia de una nueva metodología de enseñanza en la mejora de la comprensión lectora.

Importancia de la especificidad:

Además de los verbos, la formulación de un objetivo general debe ser lo más específica posible. Evita frases vagas. Define con claridad:

  • ¿Qué se va a analizar, comparar, etc.? (¿El qué?)
  • ¿Con qué criterios se evaluará o analizará? (¿Cómo?)
  • ¿Cuál es el alcance del objetivo? (¿Hasta dónde?)
  • ¿Cuál es el contexto en el que se desarrolla el objetivo? (¿Dónde?)

En resumen, la elección de verbos precisos y la incorporación de detalles específicos en la formulación de los objetivos generales garantizan la claridad, la dirección y la evaluación del proceso. Un objetivo general bien definido es el primer paso hacia el éxito.