¿Qué porcentaje de mi salario puedo destinar a una hipoteca?

¡Ay, la hipoteca! Esa gran decisión que a todos nos quita el sueño, ¿verdad? Recuerdo cuando con mi pareja empezamos a mirar pisos… ¡uff! Una mezcla de ilusión y pánico. La pregunta clave siempre era la misma: ¿cuánto podemos permitirnos realmente?

La regla del 30%… sí, la he escuchado mil veces. En teoría, no deberías destinar más del 30% de tus ingresos netos a la hipoteca. Suena bien en el papel, pero a ver, ¿cómo lo aplicamos a la vida real?

Digamos, por ejemplo, que tienes un sueldo de 2.000€ netos al mes, después de impuestos y todo eso. La calculadora dice que lo ideal sería no pasar de 600€ de hipoteca. ¡Ojo! Que aquí viene lo importante: esos 2.000€, ¿son estables? ¿Tienes algún ingreso extra por ahí que te dé un colchón? ¿Y esos gastos? ¿Ya incluiste el gimnasio, la suscripción a Netflix y ese cafecito diario que tanto nos gusta?

Porque claro, no es lo mismo un sueldo fijo de funcionario que ser autónomo, ¿me explico? O tener la suerte de vivir cerca del trabajo y no gastar en transporte que tener que comerte dos horas de atasco cada día.

Y ahí es donde entra la parte personal, lo que nadie te dice en los manuales. Porque, ¿qué pasa si tienes hijos? ¿O si tienes que ayudar a tus padres? De repente, ese 30% se hace pequeñísimo.

Yo creo que, más allá de la regla del 30%, lo importante es sentarse, respirar hondo y ser honesto con uno mismo. ¿Cuánto gastamos realmente al mes? ¿Tenemos algún ahorro para imprevistos? ¿Qué tipo de vida queremos llevar?

Porque al final, la hipoteca es una inversión, sí, pero también es un compromiso a largo plazo. Y no queremos vivir agobiados cada fin de mes, ¿verdad? Mejor pecar de prudentes que de optimistas, creo yo. ¿No les parece?