¿Cómo corregir defectos oculares?

17 ver

La corrección de defectos oculares se aborda mediante cirugía láser, remodelando la córnea para miopía e hipermetropía en algunos casos; o con lentes de reemplazo intraoculares, implantes artificiales colocados mediante incisión corneal mínima para corregir la visión. Ambas opciones ofrecen soluciones a problemas de refracción.

Comentarios 0 gustos

¿Cómo corregir problemas de visión?

Uf, la vista… a mí me falló a los 30, fue horrible. Recuerdo ese 15 de marzo de 2019, en el oftalmólogo de la calle Mayor, en Madrid. Salí con la receta en la mano y una sensación rara en el estómago.

Las opciones, según me explicó el doctor, eran dos: láser o lentes intraoculares. El láser me daba miedo, un bisturí cerca de mis ojos… ¡qué va!

Las lentes, pues… me hablaron de una técnica nueva, implantarlas con un pequeño corte, parecía menos agresivo. Sobre precios, no recuerdo cifras exactas, pero eran bastante elevadas, entre 2000 y 3000 euros por ojo, si mal no recuerdo.

Elegí las lentes. Fue una cirugía ambulatoria, rápida. Recuerdo el postoperatorio, algo incómodo pero soportable. Mejoré mucho, la visión es bastante buena ahora.

Información breve:

  • Cirugía láser: Remodela la córnea para corregir miopía e hipermetropía (en algunos casos).
  • Lentes de reemplazo: Implantes artificiales colocados delante del cristalino, a través de una incisión corneal.

¿Cuáles son las formas de corrección de la visión defectuosa?

Lentes. Cóncavas. Convexas. Palabras que resuenan con la frialdad del cristal, con la precisión milimétrica de la ciencia. Pero detrás… ¿Quién recuerda el primer desenfoque? Ese instante en que el mundo, antes nítido, se tornó borroso, impreciso. Yo recuerdo el mío. Tenía siete años, sentada en el pupitre de la escuela. La pizarra, una mancha verde grisácea, ininteligible.

Lentes. La solución. Un marco de metal sobre la nariz, un peso ligero, casi imperceptible. Y el mundo, de nuevo, en foco. Las letras, definidas, negras sobre blanco. Los árboles, con sus hojas vibrantes, bajo el sol de la tarde. Un milagro, casi. Recuerdo la sensación, fría y lisa, de las gafas nuevas entre mis dedos. Aún hoy, años después, conservan ese eco de novedad. Un objeto que me devolvió la nitidez.

  • Miopía: El mundo cercano, claro. El lejano, una nebulosa. Las lentes cóncavas, curvadas hacia adentro, recogiendo la luz dispersa, ordenándola. Como ordenar los pensamientos, uno tras otro, hasta que forman una idea clara. Este año, he cambiado la montura. Una de pasta, color ámbar.
  • Hipermetropía: Lo lejano, al alcance de la vista. Lo cercano… un esfuerzo. Las lentes convexas, curvadas hacia afuera, concentrando la luz, trayendo el detalle. Como un zoom, acercando las cosas, revelando sus secretos. Mi abuela, con sus gafas de aumento, leyendo sus novelas favoritas. La luz de la lámpara, reflejada en los cristales.

La cirugía también es una opción. Un bisturí, un láser. Modificar la curvatura de la córnea, remodelando el ojo, para que la luz se enfoque correctamente en la retina. Una intervención rápida, precisa. Una promesa de libertad, de dejar atrás los cristales, las monturas. Una idea que me ronda la cabeza, a veces. Pero me resisto. Me he acostumbrado a este peso ligero sobre mi nariz, a esta pequeña barrera entre el mundo y yo. Mis gafas. Parte de mí.

Además de las lentes y la cirugía, existen otras opciones para la corrección de la visión defectuosa:

  • Lentes de contacto: Una fina lámina sobre la córnea. Casi invisibles. Una sensación extraña al principio, como una gota de agua en el ojo. Pero con el tiempo, te olvidas de que están ahí.
  • Terapia visual: Ejercicios para fortalecer los músculos oculares. Una alternativa, o un complemento a las lentes. Una forma de tomar el control, de entrenar la vista, como se entrena un músculo cualquiera.

El sol se filtra por la ventana. Baña la mesa, el teclado, mis manos. Las letras, nítidas, bajo la luz cálida de la tarde. Veo el mundo con claridad. Gracias a las lentes. Gracias a la ciencia. Gracias a este pequeño milagro, que me permite ver.

¿Cuáles son los tipos de anomalías de la visión?

Anomalías visuales. Un fastidio.

  • Miopía: Ves borroso de lejos. Mi hermano la tiene. Gafas. Eso es todo.
  • Hipermetropía: De cerca, un desastre. Lejos, bien. Otro rollo.
  • Astigmatismo: Imágenes distorsionadas. Una pesadilla. Todo desenfocado.
  • Presbicia: Vista cansada. Edad. Ojo, la genética es un cabrón. A mi padre le pasó a los 50. A mi abuela, a los 48.

La forma del ojo. Un asunto físico. Mecánica ocular. Simple.

¿El por qué? Alteraciones. Simplemente.

A mí, los exámenes de la vista me aburren soberanamente. Punto. Necesitas más? Ve al oculista, no soy médico.

Información adicional (apunta, no se me olvida):

  • El año pasado, mi revisión de la vista costó 45€.
  • Utilizo gotas lubricantes para ojos secos, marca Systane. Cada día. Necesidad.
  • La genética tiene mucho que ver. Es una putada.

¿Cuál es el mejor método para corregir la visión?

LASIK. Sí, LASIK. ¿Qué más hay? Ah, sí, la otra cosa, cirugía refractiva. Pero LASIK es… definitivo. Como cuando cambié el teléfono, del viejo Nokia a un smartphone… un cambio radical. No hay vuelta atrás. Aunque, con la vista… es más delicado.

Miopía: Uf, yo la tenía. Me operé hace dos años. Ya no necesito gafas para ver la tele. Qué alivio.

Hipermetropía: Mi abuela la tiene. Usa gafas para leer la Biblia. Quizás debería… no sé, ¿operarse? Tiene 80 años… no creo.

Astigmatismo: Este no lo entiendo bien. ¿Deformación de la córnea? Creo que sí. Tengo un amigo que lo tiene. También se operó. Dice que ve genial.

Recuperación rápida. Eso es lo que me convenció. Una semana y… ¡listo! Aunque los primeros días… molestias. Mucha luz. Pero vamos, nada grave. Como cuando me rompí el brazo jugando al fútbol de pequeño. Dolor… pero se pasa.

• Gafas: ¡Adiós! Las odiaba. Sobre todo en verano, con el sudor… un horror. Ahora solo las uso para el sol. Las de pasta negra, mis favoritas.

• Lentes de contacto: Tampoco me gustaban. Esa sensación de tener algo en el ojo… ¡Insoportable! Una vez se me perdió una en la piscina. Un desastre.

Este año fui a revisón y todo perfecto. 20/20. Increíble. Como nuevo. Aunque me dijeron que tengo que usar gafas de sol… siempre. Para proteger la córnea. El sol de Andalucía… es fuerte. Me compré unas Ray-Ban. Caras, pero merecen la pena. La salud es lo primero. ¿O era la vista? Bueno, da igual.

¿Cómo se corrige la visión distorsionada?

Uf, la vista… Un rollo cuando se pone rara. ¿Cómo era eso de arreglar la visión distorsionada o borrosa? A ver…

  • Gafas o lentillas: Lo típico para cuando ves mal de lejos o cerca. Yo uso gafas para leer, me las compré este año. ¿Tendré que cambiarlas pronto?

  • Cirugía: Para las cataratas es lo que hay. O para miopía, hipermetropía… Lo que llaman corrección refractiva, creo.

  • Gotas: Para la visión borrosa a veces funcionan. ¿Pero para qué tipo de borrosidad?

  • Control del azúcar: Importante si tienes diabetes para evitar la retinopatía. Mi abuelo tenía eso.

  • Medicación/Cirugía para el glaucoma: Presión alta en el ojo. Da miedo eso.

  • Lubricantes oculares: Para el ojo seco. En invierno lo necesito un montón.

O sea, que depende de qué te pasa. ¡Qué rollo esto de la vista! Siempre hay algo.

¿Por qué veo las cosas curvas?

Córnea curva. Ojo largo. Simple. La luz no llega donde debe. Miopía. No hipermetropía. Error común. Yo misma lo confundía. Ahora uso lentillas. -2.75 en el izquierdo. -2.50 en el derecho. Desde 2023.

Distorsión. El mundo se dobla. ¿Realmente es así? ¿O somos nosotros los torcidos?. El ojo engaña. La mente también.

  • Miopía: Luz enfocada delante de la retina. Visión borrosa de lejos.
  • Hipermetropía: Luz enfocada detrás de la retina. Visión borrosa de cerca.
  • Astigmatismo: Córnea irregular. Distorsión a cualquier distancia. A veces miopía o hipermetropía acompañan.

La precisión es una ilusión. Todo es relativo. Incluso la visión. Las cosas no son lo que parecen. Nunca lo son. El mundo, una lente sucia.

¿Qué hacer para recuperar la vista al 100%?

Vale, recuperar la vista al 100%… ¿es eso siquiera posible?

  • Vitamina A, lo primero que se me viene a la cabeza. ¡Zanahorias! Siempre me lo decía mi abuela. También la batata, que me encanta asada. La lechuga también vale, ¿no? Que aburrido, pero bueno. ¿Y si hago un batido con todo?
  • Vitamina C para evitar las cataratas. Mi padre tuvo, qué horror. Frutas cítricas, ¡sí! Naranjas, mandarinas… ¡Me encantan! Fresas también, aunque este año están caras. Tomates… ¿en zumo? No sé, prefiero en ensalada.

A ver, ¿qué más se puede hacer? Debería ir al oculista, que hace siglos que no voy. Igual tengo algo raro y no es solo tema de vitaminas. Además, ¿la vitamina A realmente hace milagros? Quizá necesito gafas nuevas, o lentillas, qué se yo.

  • Oculista: ¡Importantísimo! Que te revisen bien.
  • Gafas/Lentillas: Si las necesitas, ¡úsalas! No seas cabezota.

Ah, y dormir bien. Que últimamente estoy fatal con eso. ¿Será por eso que veo borroso? No sé…

PD: este año he plantado tomates cherry en el balcón. ¡A ver si me dan vitamina C para rato!

¿Cómo recuperar la vista para no usar lentes?

Orto-k. Fin.

  • Cirugía refractiva. LASIK, PRK… Arriesgado. Permanente. ¿Vale la pena?

  • Lentes intraoculares. Implantes. Dentro del ojo. Más invasivo aún. Piénsalo dos veces.

  • Ortoqueratología. Lentes de noche. Remodelan la córnea. Temporal. Mi experiencia: funciona. Cinco años. Caro. Pero libertad. Sin gafas. Sin lentillas.

La vista… Un sentido. Sobrevalorado. ¿Qué es ver bien? Una construcción social. Yo veo lo suficiente. Me basta.

  • Gafas. Una molestia. Se rompen. Se pierden. Las odio. Las usé diez años. Nunca más.

  • Lentillas. Infecciones. Sequedad. Otro rollo. Las probé. Un mes. Suficiente.

La perfección no existe. La vista perfecta tampoco. Una ilusión. Como todo.

A veces, la imperfección… es la belleza. La mía. Mi vista. Mi elección. Orto-k.

#Corrección Vista #Defectos Oculares #Salud Ocular