¿Cómo saber si tengo un descontrol menstrual?

¿Cómo saber si mi período está descontrolado?

¿Periodo descontrolado? Uf, qué maremoto interno.

La ausencia… el vacío. El mes que se esconde, la luna que no llama. Este año, como en aquel lejano 2003 cuando olvidé mi cumpleaños, un silencio que ensordece. Un hueco que pesa.

La anticipación, esa impaciencia. Llega antes de tiempo, como las lluvias torrenciales de abril en mi pueblo, desbordando cauces.

Abundancia desmedida, sequía repentina. Un río de sangre incontrolable o una simple gota, un suspiro. Como los contrastes en el desierto. El alma también sangra, ¿no?

Dolor, ese viejo conocido. Un puñal invisible cada mes. Me recuerda al día que me rompí el brazo jugando, un dolor sordo que te cala hasta los huesos.

• Ausencia: el silencio lunar.
• Precocidad: la floración inesperada.
• Exceso/escasez: la balanza rota.
• Dolor: la daga en el vientre.
• Hemorragias fuera de lugar: el río desbordado.

Sangre fuera de tiempo, un presagio. Una mancha inesperada, como la tinta derramada sobre un lienzo. Inquietante, perturbador.

Y al final, es escuchar el cuerpo. Confiar en esa intuición femenina que a veces, solo a veces, nos guía con certeza.

¿Qué causa descontrol en la menstruación?

Menstruación errática. ¿Por qué?

• Embarazo: A veces, es la obviedad olvidada.
• Hormonas: Un caos interno orquestado por el cuerpo. Un desorden químico.
• Infecciones: A veces algo tan sencillo como un resfriado afecta, cosas así.
• Enfermedades: No siempre es lo evidente. Cosas raras.
• Traumatismos: El cuerpo recuerda el dolor. Guarda memoria.
• Medicamentos: La cura, a veces, es veneno. Sic transit gloria mundi.

Yo qué sé, me pasó algo parecido, pero era otra cosa.

Profundizando un poco más (aunque no me interese demasiado):

• Estrés: El gran culpable silencioso. Afecta más de lo que creemos.
• Peso: Cambios bruscos. El cuerpo reacciona. ¿Anorexia? ¿Obesidad?
• Pólipos o fibromas: Crecimientos en el útero. Suena feo, es feo.
• Endometriosis: Tejido que crece donde no debe. Dolor.
• Síndrome de ovario poliquístico (SOP): Quistes. Hormonas locas otra vez.
• Problemas de tiroides: Esa pequeña glándula que lo controla todo.
• Menopausia precoz: A veces, la vida te sorprende antes de tiempo. Es injusto.
• Lactancia: El cuerpo prioriza. La naturaleza es sabia… o cruel.
• Anticonceptivos: A veces, regulan. A veces, descontrolan. Depende.
• Cáncer: No siempre, pero hay que descartar. Asusta pensarlo.

¿Algo más?:

• Edad: La juventud y la vejez son extremas. La madurez, un espejismo.
• Genética: Lo que heredamos. No podemos escapar de nuestros genes.
• Estilo de vida: Alcohol, tabaco, drogas. Obvio, pero a veces se olvida.
• Viajes: Cambios de horario. El cuerpo se resiente.
• Ejercicio extremo: Demasiado es malo. El equilibrio es la clave.
• Dieta: Una mala alimentación afecta. Comida basura, vida basura.
• Factores ambientales: Contaminación. El mundo nos enferma.
• Problemas de coagulación: A veces, la sangre no fluye como debe.
• Aborto espontáneo: Una pérdida dolorosa que deja huella.
• Embarazo ectópico: Un peligro. Requiere atención médica urgente.

El tiempo pasa factura, ¿sabes?

¿Cómo saber si mi regla es regular?

Dios… es tarde. Las tres de la mañana… y aquí estoy, otra vez, pensando en esto. Mi regla… ¿regular? Joder.

Llevar un calendario, ¿eh? Sí, lo intenté. Uno de esos de papel, rosa pastel, con dibujitos de flores. Ridículo, lo sé. Pero… necesitaba algo… tangible. Algo que me recordara que sí, que esto también existe, que mi cuerpo hace esto. Aun así… no lo veo tan claro.

Me he fijado en los últimos seis meses. Pero, ¿seis meses son suficientes? ¿Acaso todo este tiempo son mis ciclos irregulares o estoy malinterpretando algo? Me siento… perdida. Como si mi propio cuerpo me estuviera jugando una mala pasada.

• Enero: 28 días.
• Febrero: 25 días.
• Marzo: 30 días. Lloré ese mes. No estoy segura del porqué.
• Abril: 27 días. Mucho estrés ese mes, por el trabajo.
• Mayo: 29 días.
• Junio: 31 días. El calor, supongo.

La regularidad es una ilusión. O eso creo. Al menos, para mí. Lo que parecía regular hace tres años… ahora me parece una broma cruel. No entiendo nada. Y es frustrante, jodidamente frustrante.

No hay un patrón claro. He ido al ginecólogo este año. Me hizo un montón de preguntas, análisis de sangre… Y no me ha aclarado nada. Solo me dijo “es normal que varíe”, pero, ¿hasta qué punto? Me siento tan descolocada. Necesito más respuestas. Necesito… saber.

Y esta incertidumbre… me está destrozando. La ansiedad me consume. No logro dormir, apenas como. Todo gira entorno a mi ciclo. Es una obsesión, ya lo sé. Una obsesión que me corroe.

• Dolor intenso algunos meses.
• Flujo abundante otros.
• Cambios de humor. Irritabilidad sin sentido.
• El cansancio es constante, un peso inamovible.

Ya no sé qué hacer. Solo… espero que algún día… esto cambie. O que, al menos, lo entienda.

¿Qué te puede descontrolar el período?

El ciclo. Un desajuste.

Estrés extremo. Agotamiento. Mi propia experiencia: tres meses sin regla tras el cierre de mi empresa en 2024. Caída libre. El cuerpo, un espejo roto.

Lactancia. Obvio. Retraso. Prolongado. Depende. Fluctuaciones hormonales.

Peso. Bajada drástica. Anorexia. Bulimia. Deporte obsesivo. Amenorrea. Sin rodeos. Es así. Punto.

• Desnutrición.
• Desequilibrio hormonal.
• Menstruación ausente.

Medicamentos. Algunos fármacos. Antipsicóticos, por ejemplo. Consultar al médico. Imprescindible. No es broma. Atención.

Otros factores (a veces olvidados): enfermedad grave, cirugía, síndrome de ovario poliquístico (SOP). No todo está en la báscula, ojo. Consulta médica necesaria.

¿Qué síntomas son normales en la menstruación?

Síntomas menstruales normales: Dolor, hinchazón, sensibilidad mamaria. A veces, acné. Más complejo: retención hídrica, diarrea o estreñimiento. Cabeza: migrañas. Músculos: rigidez. Agotamiento.

• Dolores: abdominales, cabeza, músculos. Intensos. Variabilidad individual. Antiinflamatorios.

• Cambios: peso (agua), acné, tránsito intestinal alterado. Normal. Control dieta.

• Fatiga: cansancio extremo. Sueño. Priorizar descanso. A veces, irritabilidad. Años así. Mi caso. 2023. Exhausta.

Nota: Consulta a tu ginecólogo si la intensidad de los síntomas afecta tu vida diaria. Sufrimiento innecesario. No automedicarse. Medicamentos. 2023. Recetas.

¿Cómo saber si soy regular o no?

¡Ay, amiga, el misterio del ciclo! Un tema tan apasionante como impredecible, ¿verdad?

21-35 días, ese es el santo grial de la regularidad menstrual. Fuera de ese rango… ¡a la aventura! Es como jugar a la ruleta rusa, pero con hormonas. A veces, llega antes de que te des cuenta, ¡zas! Y otras… ¡se hace de rogar como un novio tímido! Mi prima Elena, por ejemplo, un drama cada mes; un baile hormonal digno de Broadway.

¿Irregular? Pues eso, un descontrol de calendarios, un lío de fechas que ni la NASA podría predecir. Un ciclo que baila al son de su propia música, a veces vals, a veces heavy metal.

¿Causas? Un festín de posibilidades:

• Estrés: Como si la vida no fuera suficientemente compleja, ¡las hormonas se unen a la fiesta del caos!
• Cambios de peso: Bajas o subidas bruscas, ¡que altera hasta al más disciplinado de los ciclos!
• Ejercicio extremo: ¡Demasiado ejercicio es malo! Lo mismo que comer solo pizza (aunque me cuesta admitirlo).
• Problemas hormonales: Aquí sí que hay que llamar a la caballería, ¡al endocrinólogo!
• Cambios en la píldora anticonceptiva: Como una caja de sorpresas, nunca sabes lo que te va a tocar.
• Enfermedades: Algunas pueden ser tan impertinentes como para modificar el ciclo.

¿Te suena familiar? En mi caso, recuerdo que en 2023 tuve un par de meses extraños… ¡una montaña rusa hormonal!

En resumen: Si tus ciclos se salen del rango 21-35 días, chica, ¡tu menstruación está de fiesta y se niega a seguir el protocolo! Un ginecólogo puede ayudarte a descubrir el motivo. No lo dudes, es tu salud.

Recuerda: esta información NO sustituye una consulta médica. Si tienes dudas, ¡vete al médico! No seas heroína, pide ayuda.