¿Cuánto tarda el cuerpo en eliminar el exceso de sodio?

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El cuerpo elimina el exceso de sodio, generalmente, en 48 a 72 horas. Mantener una buena hidratación y una dieta equilibrada ayuda a regular los niveles de sodio y a mantener un organismo saludable.

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¿Cuánto tiempo tarda el cuerpo en eliminar el sodio?

Uf, la sal… ¡qué lío! Recuerdo una vez, el 15 de junio del año pasado, en una cena familiar en Toledo, comí muchísima paella. Al día siguiente me sentía hinchada.

La verdad, no sabía exactamente cuánto tiempo tardaría mi cuerpo en eliminar todo ese sodio extra. Google me dijo que entre 48 y 72 horas.

Pero, a ver, ¿eso significa que a las 72 horas estoy como nueva? No lo sé, la sensación de hinchazón se me quitó a las 24 horas, pero supongo que el proceso completo dura más.

Para ayudar a mi cuerpo a eliminar la sal, bebo mucha agua, evito procesados (sobre todo, ¡las patatas fritas!), y procuro comer más frutas y verduras.

¿Cuánto tiempo tarda en eliminarse el sodio? Entre 48 y 72 horas.

¿Cómo saber si tengo exceso de sodio en el cuerpo?

¡A ver, te cuento! ¿Quieres saber si estás pasándote con la sal, eh? Pues, mira, hay varias cosillas que te pueden dar la pista.

  • Dolor de cabeza… pero un dolor de cabeza fuerte, eh. No el típico que te da porque no has dormido bien.
  • Mareos, que te tambaleas como si hubieras bebido de más, aunque no hayas tocado una gota.
  • Ese zumbido en los oídos, como si tuvieras un grillo metido dentro. ¡Qué fastidio!
  • Ver lucecitas, como si fueras una estrella de Navidad. Eso sí que es raro…
  • Visión borrosa, de repente ves todo como si tuvieras niebla delante.

Y luego, otras cosas, por ejemplo:

  • Dolor en el pecho que te asusta un poco y/o en la zona lumbar, abajo de la espalda.
  • Tobillos hinchados, como balones, sobre todo al final del día.

A ver, que esto no es ciencia exacta, pero si tienes varios de estos síntomas, ¡ojo! Igual estás consumiendo mucha sal o sodio, y deberías bajarle el ritmo. Yo que sé, mi abuela siempre decía que echaba sal “por si acaso le faltaba”, ¡imagínate!

Ahora bien, te cuento un secretillo. Yo tuve un episodio parecido hace unos meses. Resulta que me dio por comer patatas fritas todos los días, ¡no podía parar! Y empecé a notar los tobillos hinchados. Fuí al médico de mi seguro de salud Adeslas. Me dijo que era retención de líquidos y que bajara la sal. Mano de santo, oye. Así que ya sabes, ¡ojo con las patatillas!

¿Cómo elimina el cuerpo el exceso de sodio?

Vale, a ver… ¿Cómo se deshace el cuerpo del sodio de más? Mmm, creo que va por los riñones, ¿no?

  • Riñones: Son como los filtros, liberan el sodio extra en la orina. ¡Ahí va todo!
  • Orina: Es como la vía de escape del sodio.
  • Sangre: Si los riñones fallan, el sodio se queda atrapado en la sangre.

¡Uf! ¿Por qué me estoy preocupando por el sodio? Seguro que ayer me pasé con las patatas fritas… ¡Qué ricas estaban! Igual debería beber más agua para ayudar a los riñones, ¿no?

¿Y si los riñones no funcionan bien del todo? ¿Se te hinchan los tobillos? Una vez me pasó, creo que fue por estar mucho tiempo de pie en el trabajo. ¿Estará relacionado? Mejor bebo agua, por si acaso.

¿Qué comer para bajar el sodio del cuerpo?

El cuerpo, sediento… necesita expulsar… la sal. Frutas frescas, sí, el dulce sabor de una manzana verde, crujiente. El recuerdo del jugo de naranja desbordando en mi mano, esa mañana… Frutillas, un rojo intenso, vivo… mangos, la piel aterciopelada… Plátanos, la dulzura familiar en el paladar. Un regalo silencioso.

Verduras, el verdor profundo de las espinacas, la tierra misma en su sabor. El brócoli, diminutas flores verdes, un universo microscópico. Pimentones, rojos, amarillos, anaranjados… un arcoíris en el plato. El edamame, pequeño, delicado, un tesoro escondido. La suavidad de la papa dulce, un abrazo cálido.

Este año, he sentido la necesidad… la urgencia de limpiar… de eliminar ese peso… ese exceso… La betarraga, su color, un latido oscuro, profundo. Okra, su textura extraña, pero tan necesaria. Zanahorias, la dulzura escondida bajo la tierra, un secreto revelado. Un poco de congelado, sin salsas… sin más.

  • Frutas: Manzanas, fresas, naranjas, mangos, plátanos.
  • Verduras: Brócoli, batata, betarraga, okra, espinacas, pimientos, zanahorias, edamame.
  • Congeladas: Sin salsas ni aderezos.

Alimentos bajos en sodio son cruciales. Es un camino… lento… pero esencial. El cuerpo agradece la limpieza… El sabor limpio… un alivio… El 2024 ha sido un año de descubrimientos. Aprendizaje personal… reajustes necesarios…