¿Qué pasa si se me sale un lunar?

¿Qué pasa si se me cae un lunar? Más allá del susto: cuándo preocuparse

Un lunar es una marca común en la piel, resultado de la agrupación de melanocitos. La mayoría son inofensivos, pero algunos pueden ser precancerosos o incluso cancerosos (melanoma). Por eso, cualquier cambio en un lunar existente, o su inesperada desaparición, requiere atención médica. La pregunta, “¿Qué pasa si se me cae un lunar?”, no tiene una respuesta única, depende crucialmente del contexto.

Si un lunar se desprende de forma superficial, como una pequeña costra que se cae tras un raspón o irritación leve, probablemente no sea motivo de alarma. Sin embargo, la situación cambia radicalmente si el lunar se cae dejando una herida que no cicatriza, o si la caída del lunar va acompañada de sangrado, inflamación persistente o dolor. Estos síntomas pueden indicar una lesión más profunda y requieren una evaluación profesional inmediata.

Signos de alerta tras la caída o desaparición de un lunar:

• Herida que no cicatriza: Una herida que permanece abierta, sangrante o supurando durante más de dos semanas tras la pérdida del lunar, es una señal preocupante.
• Sangrado: Cualquier sangrado asociado a la pérdida de un lunar debe ser tomado en serio. No se automedique, busque ayuda médica.
• Inflamación o enrojecimiento persistente: La inflamación alrededor del área donde estaba el lunar, que no cede con el tiempo, puede indicar una infección o un problema más grave.
• Cambios en la pigmentación: Si la zona donde se encontraba el lunar presenta cambios en el color de la piel (manchas oscuras o claras inusuales), es necesario un chequeo médico.
• Dolor: Dolor persistente en la zona donde se ha caído el lunar.
• Aumento de tamaño o cambio de forma: Aunque el lunar se haya caído, si la zona afectada aumenta de tamaño o cambia su forma, requiere una evaluación dermatológica.

¿Qué ocurre en la consulta dermatológica?

Tu dermatólogo realizará una exploración completa de la zona afectada y, si es necesario, revisará todo tu cuerpo para detectar otros lunares sospechosos. El profesional podrá determinar si la caída del lunar se debió a una causa benigna (trauma superficial) o si es necesario realizar una biopsia. La biopsia, un procedimiento simple y ambulatorio, implica la extracción de una pequeña muestra de tejido para su análisis microscópico, permitiendo determinar si se trata de un melanoma u otro tipo de lesión cutánea. Si se diagnostica un melanoma, se procederá a su extirpación completa para prevenir su propagación. La extirpación del lunar, en general, es un procedimiento sencillo y ambulatorio que se realiza con anestesia local.

En resumen, aunque la caída ocasional de un lunar superficial puede ser inofensiva, es fundamental estar atento a cualquier señal inusual. No ignore los síntomas descritos anteriormente. Ante cualquier duda, consulte con un dermatólogo. La prevención y la detección precoz son clave para un diagnóstico y tratamiento exitosos. No se automedique, su salud está en juego.

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