¿Cuántos focos poner por m2?

Iluminando tu espacio: ¿Cuántos focos por metro cuadrado? Despejando la duda más allá de los lúmenes.

La iluminación adecuada no se trata solo de contar focos; es un arte de equilibrar la intensidad, el tipo de luz y la distribución para crear el ambiente perfecto. Si bien la regla general de 350 lúmenes por metro cuadrado (equivalente a aproximadamente 4 vatios por m²) sirve como punto de partida, ignora un factor crucial: la eficacia de cada foco y el tipo de espacio. Simplemente decir “X focos por m²” es una simplificación excesiva.

El problema radica en que un foco de 4 vatios LED proporciona mucha más luminosidad que un foco incandescente de la misma potencia. La eficiencia energética y la tecnología del foco determinan cuánta luz se produce por vatio. Un foco LED de alta eficiencia puede proporcionar los 350 lúmenes deseados con tan solo 3 vatios, mientras que una bombilla halógena requeriría más.

Para una habitación de 12 metros cuadrados (3×4), la recomendación de 48 vatios de potencia lumínica (basada en 4 vatios/m²) es un buen inicio para una iluminación general. Sin embargo, esta cifra debe ajustarse según varios factores:

• Altura del techo: Un techo alto requiere más potencia lumínica que uno bajo para lograr la misma iluminación en el suelo.
• Color de las paredes: Paredes oscuras absorben más luz, necesitando una potencia mayor. Paredes claras reflejan la luz, mejorando la eficiencia.
• Tipo de foco: Bombillas LED, fluorescentes compactas o halógenas tienen diferentes eficiencias y distribuciones de luz. Las LED, por ejemplo, suelen tener una distribución más concentrada.
• Uso del espacio: Un salón requiere una iluminación más difusa y general que una cocina, donde se necesita una iluminación más focalizada en zonas específicas (encimera, fregadero).
• Iluminación ambiental vs. tareas: Se puede combinar iluminación general (ambiente) con iluminación puntual (tareas específicas como leer o cocinar).

En lugar de enfocarse únicamente en la cantidad de focos por metro cuadrado, es más efectivo considerar:

1. Lúmenes totales necesarios: Calcula los lúmenes totales (350 lúmenes/m² x superficie en m²).
2. Lúmenes por foco: Verifica los lúmenes que ofrece cada foco que planeas utilizar (en la etiqueta del producto).
3. Número de focos: Divide los lúmenes totales necesarios entre los lúmenes por foco. Esto te dará una aproximación del número de focos necesarios.
4. Distribución: Planifica la ubicación de los focos para una iluminación uniforme y funcional, considerando la altura del techo y la distribución del espacio. Experimenta con diferentes posiciones hasta lograr la iluminación deseada.

En resumen, no hay una respuesta única a cuántos focos poner por m². La clave está en entender la relación entre lúmenes, vatios, tipo de foco, y la función del espacio. Considerar estos factores te permitirá crear un ambiente iluminado de forma eficiente y estéticamente agradable.

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