¿Cuál es la temperatura media registrada en la Luna?

La Extrema Variación de Temperatura en la Luna

La Luna, nuestro satélite natural, presenta una asombrosa gama de temperaturas, oscilando entre extremos glaciales y abrasadores. Esta marcada variación está impulsada principalmente por la falta de una atmósfera significativa.

Ciclo Diurno y Nocturno

Durante el día lunar, que dura aproximadamente 14 días terrestres, la temperatura de la superficie expuesta al sol puede elevarse hasta 214°C. A medida que el sol se pone, las temperaturas descienden rápidamente, alcanzando un mínimo de -184°C durante la noche lunar.

Polos Lunares

Los polos lunares son puntos destacados de temperaturas extremas. En estas regiones, la luz solar nunca incide directamente, lo que da como resultado una temperatura constante de -96°C durante todo el ciclo lunar. Esto se debe a que cualquier calor recibido durante el día lunar se disipa rápidamente durante la noche prolongada.

Falta de Atmósfera

La extrema variación de temperatura en la Luna es una consecuencia directa de la falta de una atmósfera. Una atmósfera actúa como una manta protectora, atrapando el calor y regulando las temperaturas. En ausencia de una atmósfera, la superficie de la Luna está expuesta directamente a la radiación solar durante el día y al frío del espacio exterior durante la noche.

Implicaciones para la Exploración

La variación de temperatura en la Luna presenta desafíos únicos para la exploración y el establecimiento de una presencia humana. Los futuros exploradores necesitarán diseñar equipos, trajes espaciales y hábitats que puedan soportar estos extremos. Comprender las temperaturas extremas es esencial para garantizar la seguridad y el éxito de las misiones lunares.

Conclusión

La temperatura de la Luna varía significativamente, desde los abrasadores 214°C durante el día hasta los helados -184°C durante la noche. Esta variación extrema se debe a la falta de atmósfera, que permite que la superficie se caliente y enfríe rápidamente. Comprender estas variaciones de temperatura es crucial para la planificación de futuras misiones lunares y para establecer una presencia humana sostenible en nuestro satélite celestial.