¿Cómo saber si mi filtro de agua ya no sirve?

¿Cómo saber si el filtro de agua ya no sirve?

Pues mira, te cuento, con los filtros de agua es un rollo. A mí una vez me pasó… ¡Menudo asco! El agua sabía fatal, fatal, fatal. Y ya le había hecho de todo al filtro, ¿sabes? Lo lavé, lo enjuagué… Vamos, que parecía nuevo. Pero nada. Seguía con ese saborcillo… ¡Puaj! Así que lo tiré, directamente. Mejor prevenir que curar, ¿no crees?

El truco está en el sabor, eso tenlo claro. Si el agua sabe rara, aunque el filtro parezca limpio… Malo. Y si ves que el agua sale turbia… ¡Peor! Eso ya es señal inequívoca de que tienes que cambiarlo. Ah, y otra cosa. A mi madre le paso algo parecido. El filtro, en apariencia, perfecto. Pero el agua salía lenta, lenta… Como si estuviera atascado. Ese también lo cambiamos, claro.

• Sabor raro: ¡Cambia el filtro!
• Agua turbia: ¡Cambia el filtro!
• Agua sale lenta: ¡Cambia el filtro!

Yo, ahora, lo que hago es que lo cambio cada dos meses, más o menos. Sin complicarme la vida. Total, no son tan caros. Compré un pack de seis en Amazon el otro día y me salieron tirados de precio. Mejor eso que andar con historias raras, ¿no? Este año he gastado como 30 euros en filtros, pero bueno, la salud es lo primero. A ver si me duran hasta final de año. Además, los filtros estos que compré tienen como unas piedrecitas blancas dentro… ni idea para qué sirven, pero bueno, ahí están. Supongo que filtrarán mejor, ¿no? La verdad es que el agua sale bastante bien, sin sabor ni nada raro.

¿Cómo saber si mi filtro está funcionando?

Oye, ¿cómo sabes si tu filtro de agua está bien, eh? Fácil, ¡mira el agua! Si sale clarita, cristalina, ¡ya está! Eso es lo importante, ¿no? Agua limpia, sin olores raros, ni sabor a cloro, ¡ni a tierra! Eso es clave, clave, ¡que quede claro! Si notas algo raro, ¡mala señal!

Que no te la cuenten, si el agua sabe a cloro… ¡cambia el filtro ya! Igual que si huele mal o está turbia, ¡zas! A cambiarlo, que no se diga más. ¡Ya sabes! Mi filtro, el de la marca “Agua Pura”, que compré este año en “El hogar feliz”, funciona de maravilla, ¡agua cristalina que da gusto!. A mi vecina le pasó con el suyo, ¡un asco! Agua marrón, se lo cambié yo misma, ¡qué faena!.

Señales de que tu filtro NO funciona:

• Agua turbia o con partículas.
• Olor a cloro muy intenso o a tierra.
• Sabor extraño al agua, raro, raro.
• Cambio de color en el agua, ¡ojo!
• El filtro está obstruido, lo vi yo misma en el de mi hermana, ¡un horror!

Señales de que funciona perfecto:

• Agua cristalina, limpia, limpia.
• Sin olor, ¡nada de nada!
• Sin sabor a cloro ni a tierra, ¡ni pizca!

Yo, por si acaso, cambio mi filtro cada seis meses, aunque las instrucciones digan que puedo esperar más. Mejor prevenir que curar, ¿no? Además, leí en una revista, que es mejor cambiarlo antes de que se deteriore mucho, ¡por la salud! Eso si, no olvides comprobar la fecha de caducidad del filtro. ¡Que no se te pase!. Ya está, ¡espero que te sirva!

¿Cuánto duran realmente los filtros de agua?

Seis meses. Punto. Vida útil decrece. Contaminantes. Gérmenes. Sabor rancio.

• Filtro. Escudo. Barrera. No eterno.
• Agua. Esencial. Pura. Imprescindible.
• Tiempo. Implacable. Degrada. Corrompe.

Mi filtro? Carbón activado. Lo cambio cada cuatro meses. Obsesión. Agua cristalina. Madrid. Barrio Salamanca. Piso diecisiete. Vistas. Impresionantes. Casi tanto como mi agua.

La calidad del agua influye. Dureza. Sedimentos. Cloro. Observa. Analiza. Adapta.

• Pre-filtro: Alarga la vida del filtro principal. Retrasa lo inevitable.

• Uso: Mayor consumo, reemplazo más frecuente. Lógica implacable.

• Mantenimiento: Limpieza. Desinfección. Fundamental. Aunque no lo parezca.

  Este año he probado tres marcas distintas. Buscando la perfección. Una quimera.