¿Qué pasa si pongo un vaso con agua y sal en el congelador?

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Al añadir sal al agua, se disminuye su punto de congelación. El vaso se congelará a una temperatura más baja que el agua pura. Se necesita una cantidad específica de sal para lograr este efecto.
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El Efecto del Agua Salada Congelada

La congelación del agua es un proceso común que implica la transformación del agua líquida en un sólido cristalino. Sin embargo, cuando añadimos sal al agua, su punto de congelación desciende, lo que significa que se necesita una temperatura más baja para que el agua se congele.

Disminución del Punto de Congelación

La sal, un compuesto iónico compuesto por sodio (Na+) y cloro (Cl-), actúa como un electrolito cuando se disuelve en agua. Los iones Na+ y Cl- se separan y rodean las moléculas de agua, formando una capa protectora a su alrededor.

Esta capa protectora evita que las moléculas de agua se unan entre sí y formen cristales de hielo. Como resultado, se requiere una temperatura más baja para que el agua salada alcance su punto de congelación.

Temperatura de Congelación Específica

La cantidad de sal que se añade al agua determina la disminución del punto de congelación. Cada tipo de sal tiene su propia temperatura de congelación eutéctica, que es la temperatura más baja a la que una solución de sal y agua puede permanecer líquida.

Por ejemplo, para el cloruro de sodio (sal común), la temperatura de congelación eutéctica es de -21,1°C. Esto significa que una solución de agua y sal con una concentración de aproximadamente 23,3% en peso de cloruro de sodio se congelará a -21,1°C.

Aplicaciones Prácticas

Este descenso del punto de congelación tiene varias aplicaciones prácticas. Por ejemplo:

  • Conservación de alimentos: Espolvorear sal sobre los alimentos ayuda a conservarlos al reducir la temperatura de congelación y evitar que se estropeen.
  • Prevención de la formación de hielo: La sal se utiliza en las carreteras y aceras durante el invierno para evitar la formación de hielo, ya que disminuye el punto de congelación del agua.
  • Fabricación de helados: La adición de sal a la mezcla de helados ayuda a reducir la temperatura de congelación, lo que resulta en helados más suaves y cremosos.

En conclusión, añadir sal al agua disminuye su punto de congelación debido a la formación de una capa protectora alrededor de las moléculas de agua. La temperatura específica de congelación depende de la concentración de sal. Este fenómeno tiene aplicaciones prácticas en la conservación de alimentos, la prevención de la formación de hielo y la fabricación de helados.