¿Cuáles son 10 recomendaciones para una buena hidratación?

11 ver

Recomendaciones para una buena hidratación:

  • Bebe 2-3 litros de agua al día.
  • Inicia el día con agua.
  • Hidrátate antes, durante y después del ejercicio.
  • Consume frutas y verduras ricas en agua.
  • No esperes a sentir sed.
  • Evita el alcohol y bebidas gaseosas.
  • Conoce tus necesidades individuales.
  • Lleva siempre una botella de agua.
  • Escucha a tu cuerpo.
  • Ajusta la ingesta según clima y actividad.
Comentarios 0 gustos

¡Ay, la hidratación! Algo tan básico, ¿verdad? Pero que a veces se nos olvida por completo. Yo, la primera. A ver, que me lío… les cuento mis 10 cositas que he aprendido (a veces a la fuerza, eh) sobre cómo mantenernos bien hidratados.

Recomendaciones para una buena hidratación (según yo, y algunos expertos por ahí)

  • Bebe 2-3 litros de agua al día. Esto es como el mantra, ¿no? “Dos litros, dos litros…” Pero, a ver, ¿quién se mide exactamente? Yo intento, pero a veces se me pasa. Lo importante es tener una idea, ¿no creen? Que no te quedes en un vaso al día, ¡por favor!

  • Inicia el día con agua. Esto es algo que aprendí hace poco y ¡wow! Qué diferencia. Me tomo un vaso grande al levantarme, antes del café (que conste, amo el café). Siento que mi cuerpo despierta mejor. No sé, ¿será psicológico? Pero funciona.

  • Hidrátate antes, durante y después del ejercicio. Esto es obvio, pero crucial. Una vez, salí a correr sin beber nada antes… ¡error! Me sentí fatal, mareada. Desde entonces, agua antes, botellita durante (aunque pese un poco) y después… ¡a reponer!

  • Consume frutas y verduras ricas en agua. ¿Sandía en verano? ¡Por favor! Y pepino en ensaladas… ¡me encanta! No todo tiene que ser agua pura y dura, la comida también ayuda. Además, es más sabroso, ¿no les parece?

  • No esperes a sentir sed. Este es un clásico. La sed ya es señal de que estás deshidratado. Intenta beber a lo largo del día, aunque no te apetezca mucho. Como dice mi abuela, “más vale prevenir…”

  • Evita el alcohol y bebidas gaseosas. Ay, el alcohol… Un vinito con la cena, ¿quién se resiste? Pero ojo, que deshidratan. Y las gaseosas… llenas de azúcar y no quitan la sed. Mejor agua con limón, ¿no?

  • Conoce tus necesidades individuales. Cada cuerpo es un mundo. Yo, por ejemplo, necesito más agua que mi hermana. Depende de tu tamaño, tu nivel de actividad… escucha a tu cuerpo. Que él sabe.

  • Lleva siempre una botella de agua. Esto es como llevar las llaves o el móvil. Indispensable. Así, siempre tienes agua a mano y no tienes excusa para no beber. Yo tengo una botella reutilizable que me acompaña a todas partes.

  • Escucha a tu cuerpo. A veces, creemos que tenemos hambre, pero en realidad tenemos sed. ¿Les ha pasado? Presta atención a las señales de tu cuerpo. Él te dirá lo que necesita.

  • Ajusta la ingesta según clima y actividad. En verano, o cuando hago ejercicio intenso, bebo mucha más agua. Es lógico. Adapta tu hidratación a las circunstancias. ¡No es lo mismo estar en la playa que en la oficina!

En fin, estos son mis consejitos. Tampoco soy ninguna experta, pero es lo que me ha funcionado a mí. ¿Y a ustedes? ¿Qué trucos tienen para mantenerse hidratados? ¡Me encantaría saber!

#Hidratacion #Recomendaciones #Salud