¿Cómo saber si es gastroenteritis viral o bacteriana?

Cómo diferenciar entre gastroenteritis viral y bacteriana

La gastroenteritis es una inflamación del estómago y los intestinos que puede causar náuseas, vómitos, diarrea, calambres abdominales y fiebre. Puede ser causada por virus, bacterias o parásitos.

Diferenciar entre gastroenteritis viral y bacteriana es importante porque el tratamiento y el pronóstico pueden variar.

Síntomas

Los síntomas de la gastroenteritis viral y bacteriana son similares, pero hay algunas diferencias sutiles que pueden ayudar a distinguirlas:

• Gastroenteritis viral: Suele tener un inicio agudo con náuseas, vómitos y diarrea. Los síntomas suelen durar unos días y pueden estar acompañados de fiebre leve y dolor de cabeza.
• Gastroenteritis bacteriana: A menudo tiene un inicio más gradual con diarrea acuosa o con sangre. Los síntomas pueden durar más tiempo y pueden incluir fiebre alta, escalofríos y dolor abdominal intenso.

Pruebas de diagnóstico

El diagnóstico definitivo de gastroenteritis viral o bacteriana requiere un análisis de heces. Hay pruebas rápidas disponibles que pueden detectar rotavirus y norovirus, los dos virus más comunes que causan gastroenteritis. Sin embargo, estas pruebas no pueden detectar todos los virus.

Las muestras fecales también pueden analizarse para descartar infecciones bacterianas o parasitarias. Esto puede ayudar a completar el diagnóstico.

Tratamiento

El tratamiento de la gastroenteritis viral se centra en controlar los síntomas y prevenir la deshidratación. No hay medicamentos antivirales específicos para la gastroenteritis viral.

El tratamiento de la gastroenteritis bacteriana puede implicar antibióticos, según el tipo de bacteria causante. También es importante mantenerse hidratado y comer alimentos blandos y fáciles de digerir.

Pronóstico

El pronóstico de la gastroenteritis viral suele ser bueno. La mayoría de las personas se recuperan en unos días sin complicaciones.

La gastroenteritis bacteriana puede ser más grave y puede provocar complicaciones como deshidratación, desequilibrio electrolítico e incluso sepsis. Sin embargo, con el tratamiento adecuado, el pronóstico suele ser positivo.

Prevención

La gastroenteritis viral y bacteriana se pueden prevenir siguiendo estas medidas:

• Lavarse las manos con frecuencia con agua y jabón.
• Evitar compartir alimentos o bebidas con personas enfermas.
• Cocinar bien los alimentos y evitar comer alimentos crudos o poco cocinados.
• Beber agua potable.
• Obtener la vacuna contra el rotavirus para prevenir la infección por rotavirus.