¿Qué hacer si la herida no deja de sangrar?

27 ver

Si el sangrado persiste tras aplicar presión directa con un vendaje limpio, eleva la extremidad afectada por encima del corazón. Acostar a la persona y abrigarla para prevenir la hipotermia también es crucial mientras se busca asistencia médica inmediata.

Comentarios 0 gustos

Sangrado Incesante: Una Guía para Actuar con Rapidez y Eficiencia

Un corte, una raspadura, una herida más profunda… son situaciones cotidianas que, en la mayoría de los casos, se resuelven con un simple apósito. Sin embargo, ¿qué sucede cuando el sangrado persiste a pesar de nuestros esfuerzos? La hemorragia incesante es una emergencia médica que requiere una respuesta rápida y eficaz. No es cuestión de esperar a ver qué pasa; la pronta actuación puede salvar una vida.

La presión directa sobre la herida con un vendaje limpio y estéril es el primer paso fundamental. Mantener una presión firme y constante durante al menos 10-15 minutos, sin levantar el vendaje para observar, es crucial para la formación de un coágulo. Si el sangrado continúa empapando el vendaje, agregue capas adicionales encima, sin retirar las preexistentes, para mantener la presión.

Más allá de la presión directa: pasos esenciales si el sangrado persiste.

Si a pesar de aplicar la presión directa adecuada, el sangrado sigue siendo abundante o no se detiene, es vital tomar medidas adicionales mientras se solicita ayuda médica urgente:

  • Elevación de la extremidad: Elevar la parte del cuerpo afectada por encima del nivel del corazón reduce el flujo sanguíneo hacia la herida, favoreciendo la coagulación. Esta técnica es particularmente útil en hemorragias en extremidades (brazos y piernas).

  • Posición decúbito supino: Acostar a la persona afectada sobre su espalda (posición decúbito supino) ayuda a mantener estable su circulación y a prevenir mareos o desmayos causados por la pérdida de sangre.

  • Mantener la temperatura corporal: La pérdida de sangre puede provocar hipotermia, especialmente en ambientes fríos. Abrigar a la persona con mantas o cualquier prenda disponible es esencial para mantener su temperatura corporal.

  • Control del pulso y respiración: Monitorear el pulso y la respiración de la persona ayudará a evaluar la gravedad de la situación y a comunicar información vital al personal médico. Un pulso débil y una respiración rápida son señales de alarma.

  • Llamada de emergencia: Nunca subestimes la importancia de buscar atención médica inmediata. Llama al servicio de emergencias de tu país (por ejemplo, el 911 en Estados Unidos o el 112 en Europa) o acude al centro médico más cercano sin demora. Proporciona al operador toda la información relevante: ubicación, gravedad de la herida, cantidad de sangre perdida, etc.

Qué NO hacer:

  • No retirar el vendaje empapado de sangre: Esto podría interrumpir el proceso de coagulación y reiniciar la hemorragia. Agrega capas nuevas sobre el vendaje existente.
  • No aplicar torniquete a menos que esté entrenado para hacerlo: Un torniquete mal aplicado puede causar daño irreversible a los tejidos.
  • No usar remedios caseros no probados: Concéntrate en las medidas de primeros auxilios descritas anteriormente.

La hemorragia incesante es una situación que requiere una respuesta rápida y eficiente. Seguir estos pasos, junto con la búsqueda de atención médica inmediata, incrementará significativamente las posibilidades de un resultado positivo. Recuerda que la rapidez y la precisión son fundamentales en estos casos.

#Hemorragia Grave #Herida Sangrante #Sangrado Herida