¿Qué rango de pH es peligroso para el cuerpo?

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Valores de pH por debajo de 6.8 y por encima de 7.8 pueden ser perjudiciales para el organismo humano. La sangre y el interior celular se mantienen en un rango muy estrecho (aproximadamente 7.35-7.45) para un correcto funcionamiento.
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El delicado equilibrio del pH: un rango peligroso para el cuerpo humano

El pH, una medida de la acidez o alcalinidad de una sustancia, juega un papel fundamental en nuestro bienestar general. Si bien el cuerpo humano es una máquina de amortiguación eficiente, ciertos niveles de pH pueden amenazar su delicado equilibrio.

Rangos de pH peligrosos

Los valores de pH que se desvían significativamente del rango normal de 7,35 a 7,45 pueden tener consecuencias perjudiciales.

  • Valores de pH por debajo de 6,8: Estos niveles extremadamente ácidos pueden causar acidosis, una condición en la que la sangre se vuelve demasiado ácida. La acidosis puede provocar daño celular, falla orgánica y, en casos extremos, la muerte.

  • Valores de pH por encima de 7,8: Los niveles alcalinos excesivamente altos conducen a la alcalosis, en la que la sangre se vuelve demasiado alcalina. La alcalosis puede alterar el equilibrio electrolítico del cuerpo, lo que lleva a convulsiones, coma e incluso la muerte.

Importancia para la función corporal

La sangre y el interior de las células se mantienen dentro de un rango de pH muy estrecho para garantizar un funcionamiento óptimo.

  • Sangre: El pH sanguíneo óptimo es de aproximadamente 7,4. Las desviaciones de este valor pueden interferir con las funciones enzimáticas y otros procesos bioquímicos esenciales.

  • Interior celular: El pH dentro de las células se mantiene ligeramente más bajo, alrededor de 7,2. Este rango de pH ácido es crucial para procesos celulares como la producción de energía y la regulación genética.

Mecanismos de amortiguación

El cuerpo humano tiene mecanismos de amortiguación sofisticados para mantener el pH dentro del rango saludable.

  • Sistemas de amortiguación: Los sistemas de amortiguación, como el sistema tampón de bicarbonato, ayudan a neutralizar ácidos y bases, manteniendo el pH relativamente estable.

  • Control respiratorio: La respiración puede influir en el pH sanguíneo. Hiperventilar, por ejemplo, puede eliminar el dióxido de carbono, aumentando el pH sanguíneo.

  • Control renal: Los riñones juegan un papel crucial en la regulación del pH al excretar o reabsorber ácidos y bases.

Conclusión

El rango de pH entre 6,8 y 7,8 es esencial para el correcto funcionamiento del cuerpo humano. Las desviaciones de estos valores pueden tener graves consecuencias para la salud. El mantenimiento de un pH saludable es vital para mantener un cuerpo sano y equilibrado.