¿Cuánto tiempo tarda en hacer efecto la comida echada a perder?

¿Cuánto tarda en hacer efecto una comida mala?

Malestar. Un peso en el estómago. Retortijones… ¿Horas? ¿Días? El tiempo se distorsiona, se estira como un chicle masticado hasta la extenuación. Recuerdo un picnic, este verano. Sandía jugosa, el sol derramándose sobre el mantel a cuadros. Risas. Y luego… la noche. La noche interminable.

Sombras danzando en las paredes. Escalofríos. El cuerpo, una carcasa vacía, recorrida por oleadas de frío y calor. El estómago, un volcán en erupción. Vómitos. Diarrea. Una y otra vez. El tiempo… una espiral descendente.

• Malestar estomacal: Una presión constante, una opresión que no cede. Como una piedra alojada en las entrañas.
• Diarrea: Un torrente incesante, un vacío que se abre paso a la fuerza. Debilidad. Deshidratación.
• Vómitos: Espasmos violentos que sacuden el cuerpo, dejando un sabor amargo y metálico en la garganta. Un eco del picnic, de la sandía, del sol… Un eco distorsionado, putrefacto.

Este año, juré no volver a un picnic. La sandía, antes un símbolo de verano, ahora es un recordatorio de esa noche. De la oscuridad, del vacío. Del tiempo detenido en un bucle de malestar. Mi hermana, ella sí que resistió la intoxicación. Comió el doble de sandía que yo y nada. Quizá sea mi organismo, tan susceptible…

Varias horas o días. Esa es la respuesta. Un abismo de incertidumbre que se abre ante la más mínima sospecha. La espera, la angustia… El veneno silencioso que se extiende por el cuerpo, esperando su momento para estallar.

¿Cuánto tiempo tarda para que te caiga mal la comida?

El tránsito intestinal es personal. No hay relojería fina, solo estimaciones.

• 36 horas en el colon. Es el viaje final. El despojo.
• 2-5 días para la metamorfosis completa. De bocado a desecho.

No todos somos iguales. Influyen:

• Dieta: fibra vs. ultraprocesados.
• Hidratación: agua es vida, también para el tránsito.
• Actividad física: el movimiento es ley.
• Metabolismo individual: mi abuela siempre decía que yo tenía el estómago de un avestruz.

Observa tu cuerpo. Él te da las pistas. No hay atajos.

¿Cómo saber si me hizo mal una comida?

Agh, qué mal rato pasé en julio, en Málaga. Comimos espetos en un chiringuito en la playa. Arena, sol, gaviotas… Parecía idílico. Pero a las pocas horas… Empecé a sentirme fatal.

Retortijones horribles. No podía ni moverme. Sudor frío. Escalofríos. Malestar estomacal en toda regla. Corriendo al baño. Acabé vomitando todo. El pescado, las patatas, todo. Qué asco. Literalmente, todo. Qué desperdicio de espetos, encima carísimos.

La cosa no quedó ahí. Luego empezó la diarrea. Fatal. Sin parar. Pasé la noche entera en el baño del hotel. Un horror. Diarrea acuosa, sin sangre, por suerte. Pero no podía ni beber agua.

Me dolía la cabeza muchísimo. Y el estómago… Uf, dolor de estómago. Como si me retorcieran las tripas. Calambres abdominales fortísimos. Imposible dormir. Creía que me moría.

• Malestar estomacal. Eso fue lo primero.
• Vómitos. Todo para fuera.
• Diarrea. Sin parar.
• Dolor de estómago. Horrible.
• Calambres. Insoportables.

No tuve fiebre. Al menos eso. Pero el dolor de cabeza era brutal. Tomé paracetamol, pero no me hizo mucho efecto. Debí haber ido al médico, pero con el viaje y todo… No quería perder más tiempo.

Al final, se me pasó al cabo de un día y medio. Mucho líquido, dieta blanda… Fue una intoxicación alimentaria en toda regla. Los espetos debían estar malos. O a lo mejor fue la mayonesa. Nunca lo sabré. Eso sí, aprendí la lección. Ahora soy mucho más cuidadosa con lo que como, sobre todo en la playa. Y nunca más espetos. Qué trauma. De Málaga me quedo con la playa, no con la comida.

Síntomas de intoxicación alimentaria: Malestar estomacal, vómitos, diarrea, dolor de estómago, calambres, fiebre, dolor de cabeza. (Diarrea con sangre puede indicar algo más grave.)

¿Qué tomar si has comido algo en mal estado?

Ugh, maldita sea. Comida mala, otra vez. Loperamida o bismuto, creo. Me suena de algo… Sí, Imodium para la diarrea. Bismuto… ¿Pepto-Bismol? Lo tengo en el botiquín. Siempre lo tengo, por si acaso. Un clásico. ¿Caducado? Nah, creo que no. El Imodium también lo tengo. El genérico, más barato. Pero funciona igual, ¿no?

• Loperamida (Imodium): Para la diarrea. No si hay fiebre o sangre.
• Bismuto (Pepto-Bismol): Malestar estomacal. Ese sabor… peculiar.

La última vez que me pasó esto fue en 2023, en ese restaurante nuevo… tailandés. No, no, era vietnamita. Bah, da igual. Me sentó fatal. Dos días en cama. Esta vez espero que no sea tan grave. Mucha agua, eso sí. Y nada de lácteos, por si acaso. Ya bastante tengo con el estómago revuelto. A ver si encuentro unas galletas saladas. Siempre tengo en casa. Las maría, las de siempre. Me ayudan a asentar el estómago. Y manzanilla. Infusiones de manzanilla. Mi abuela siempre decía que era mano de santo. A ver si encuentro también el Aquarius de limón. Me va genial para la deshidratación.

El año pasado, compré un probiótico. Lactobacillus, o algo así. Decían que era bueno para la flora intestinal. ¿Lo tomo o no? Bah, no sé dónde lo metí. Seguro que está caducado. Mejor loperamida y bismuto. A lo clásico. Más fiable. ¿O no? Buf, no sé. A ver cómo evoluciona la cosa. Si me pongo peor, al médico. Aunque paso de ir. Siempre hay mucha gente esperando. Mejor esperar un poco más. A ver si se me pasa solo.

¿Cómo reacciona el cuerpo ante un veneno?

Sudor frío. Malestar general. Me acuerdo de esa vez, en el verano del 2024, en la playa de Zahara de los Atunes. Estábamos, mi hermana y yo, buscando conchas… conchas y caracolas. El sol a plomo. Arena quemando. Un calor… De repente, un dolor agudo en el pie. ¡Ay! Grité. Mi hermana, asustada, se acercó corriendo.

Una pequeña medusa, transparente, casi invisible, se había pegado a mi pie. Picadura. Al principio, solo un escozor. Pero en cuestión de minutos… La piel se puso roja, empezó a hincharse. Un dolor punzante, intenso. Miedo. Mucho miedo. Empecé a sentirme mareada. Náuseas. Me dolía la cabeza. No sabía qué hacer.

• Dolor agudo.
• Enrojecimiento.
• Inflamación.
• Mareo.
• Náuseas.

Corrimos hacia el puesto de socorro. Vinagre. Eso me echaron. Vinagre. El dolor seguía ahí, palpitante. La zona afectada estaba como… como si me hubieran quemado con un hierro. Me dieron un antihistamínico. Poco a poco, el dolor fue remitiendo. La hinchazón también. Pero la marca, la marca rojiza, me duró semanas. Reacción. Una simple medusa. Y mi cuerpo… reaccionó como si hubiera luchado contra un monstruo. Nunca me había sentido así. Ahora, cada vez que voy a la playa… miro, miro y miro. El miedo se quedó.

Síntomas: Enrojecimiento, inflamación, dolor, mareo, náuseas…

Tratamiento: Vinagre, antihistamínico.

Medusa: Pequeña, transparente.

Playa de Zahara de los Atunes: Verano 2024.

El vinagre neutraliza las toxinas de algunas medusas. No todas. Y si los síntomas son graves… hospital. Eso me dijeron en el puesto de socorro. Importante. No frotar la zona afectada. Agua salada, nunca agua dulce. Aumenta el dolor.

¿Qué le pasa al cuerpo cuando toma veneno?

Veneno. Destrucción silenciosa.

• Efectos diversos: Desde malestar pasajero a daño irreversible. El cuerpo se defiende como puede. A veces, no es suficiente.
• El cerebro sufre: Confusión. Pérdida de control. El final puede ser oscuro.
• Precaución: Un veneno no respeta las advertencias. Siempre hay niños. Siempre hay descuidos. La ignorancia no es excusa.
• La muerte: A veces, inevitable. Un destino cruel.

El veneno no es solo una sustancia. Es una decisión. Un accidente. Un error.

Información adicional:

• Conozco un caso. Un vecino. Confundió lejía con agua. Un error fatal.
• Mi abuelo decía: “El veneno más peligroso es el que no se ve”. Razón no le faltaba.
• ¿Sabías que algunas plantas son venenosas al tacto? La naturaleza esconde trampas.
• Este año aumentaron los casos de intoxicación por setas silvestres. La gente se cree experta.
• Los metales pesados, como el mercurio, se acumulan en el cuerpo. Lentamente. Silenciosamente.

Y recuerda: “La ignorancia mata más que el veneno”.

¿Qué le sucede a alguien cuando está envenenado?

Síntomas de envenenamiento. Vómitos. Dolor de estómago. Mareos. Qué raro, ¿no? Como si te hubieran dado una paliza. Yo una vez me intoxiqué con marisco… fatal, todo el día vomitando. 2024, el año del marisco malo, para mí, claro.

Quemaduras en la boca. Aliento raro. Sudor frío. Eso sí que da miedo. A mi tía le pasó, no por veneno, por un golpe de calor. Pensamos que se moría. Fue en julio de este año, un calor horrible.

Me acuerdo de las clases de biología, ¿o eran de química? Hablaban de intoxicaciones. Dificultad para respirar. Pupilas dilatadas. No sé por qué me acuerdo de eso ahora. Tengo que comprar leche, se me ha acabado.

Convulsiones. Pérdida del conocimiento. A veces pienso que me voy a desmayar, sobre todo cuando hace mucho calor. Igual es por la tensión baja. Debería ir al médico.

Vómitos, dolor de estómago, mareos, quemaduras en la boca, aliento raro, sudor frío, dificultad para respirar, pupilas dilatadas, convulsiones, pérdida de conocimiento. ¿Qué más? Ah sí, confusión. Mucha confusión. Como cuando estás borracho, o peor. Yo una vez… bueno, mejor no cuento esa historia. Basta con lo del marisco. Uy, el móvil. Me están llamando.

Información extra: Importancia de llamar al teléfono de emergencias. Yo lo tengo en favoritos, por si acaso. Nunca se sabe. También tengo el del centro de toxicología. Me lo apunté cuando mi sobrino pequeño empezó a andar. Por si acaso, ya sabes. Los niños… Siempre metiendo cosas en la boca. El mío, por suerte, no. Bueno, alguna vez sí. Un botón. Pero nada grave.

¿Cómo actúa una persona envenenada?

Envenenado. Depende.

• Mareos, quizás.
• Náuseas, sí, o no.
• Vómitos… posiblemente.
• Dolor de cabeza constante.
• Sueño. Demasiado sueño.
• Confusión mental.
• Cambios en el ritmo cardíaco. A veces.
• Desmayo repentino.
• La muerte. Final inevitable.

El monóxido. Un asesino silencioso. Como el tiempo.

Yo lo viví. Casi. Olía a tostadas quemadas, pero no había tostadora. Entonces el mundo se apagó. Ahora estoy aquí. Escribiendo esto.

Información adicional:

• La ventilación es clave. Abre las ventanas.
• Detectores de CO. Una inversión vital.
• Mantenimiento de estufas y chimeneas. Prevenir es curar.
• No uses generadores dentro de casa.
• Si sospechas, sal. Llama al 112.

La vida. Un suspiro.