¿Cómo se llama el atardecer del Sol?

¿Cómo se le llama al atardecer del Sol?

Crepúsculo vespertino. Simplemente eso.

El sol, ya ido. La luz, un recuerdo. Oscuridad próxima.

• Atardecer.
• Ocaso.
• Anochecer.
• Arrebol. (Prefiero este. Más evocador.)

Mi abuela, en su pueblo, lo llamaba “la hora de las sombras largas”. Siempre me gustó esa frase.

Más datos: La duración del crepúsculo varía según la latitud y la época del año. En 2024, en Madrid, el crepúsculo vespertino más largo este año fue, a ojo, alrededor de una hora y diez minutos el 21 de junio. El cielo, esos colores. Un espectáculo efímero. Los rojos intensos, los naranjas suaves. Un instante. Luego, negro.

El crepúsculo matutino, al amanecer, es diferente. Pero esa es otra historia. Otro color. Otra sensación.

Y, por cierto, yo vi una puesta de sol increíble en la playa de las Teresitas, en Tenerife, este mismo verano. Inolvidable. Un rojo profundo, casi sangriento.

¿Cómo se llaman las puestas de Sol?

Puesta de sol. ¡Así, sin más! Como si fuera una película de vaqueros. También le puedes decir ocaso, que suena más poético, como si fueras a escribirle un poema a tu cactus favorito.

• Atardecer: Clásico, efectivo, como un bocadillo de chorizo.
• Anochecer: Cuando ya estás pensando en qué serie vas a maratoneaar.
• Crepúsculo: Para los fans de vampiros brillantes, ¿o eran hombres lobo? Bueno, da igual.
• Atardecida/Anochecida: ¿En serio? Suenan a nombre de telenovela venezolana. ¡Dramático!

Yo, personalmente, una vez vi una puesta de sol tan, pero TAN naranja, que parecía que un gigante había exprimido un millón de naranjas en el cielo. Fue en Cádiz, en 2024, comiendo pescaíto frito. ¡Casi lloro de la emoción! (y de la cantidad de mayonesa que le eché).

Ojo: No confundir con la salida del sol, ¡que esa se llama amanecer! A menos que seas un murciélago, claro. Entonces, ¡fiesta al amanecer!

Y ahora, ¡a disfrutar del espectáculo! (y de las naranjas, si tienes).

¿Cómo se le llama al ocaso del sol?

Ocaso. Simplemente ocaso. También se le llama puesta del sol.

• Atardecer.
• Anochecer.
• Crepúsculo.

Son sinónimos válidos, matices de una misma realidad. Curiosamente, el lenguaje nos ofrece diversas maneras de nombrar la desaparición del sol, ¿será porque nos resistimos a su ausencia? Quizás cada palabra intenta capturar un instante distinto de ese desvanecimiento, una pincelada particular en la paleta del cielo.

La puesta de sol, con su rotundidad, me evoca la imagen del disco solar hundiéndose tras el horizonte. Atardecer, en cambio, sugiere un proceso más gradual, una lenta transición hacia la oscuridad. Crepúsculo, con su aura de misterio, me hace pensar en el encuentro entre la luz y la sombra. Una vez, acampando en la Sierra Nevada, recuerdo un crepúsculo especialmente vibrante, casi irreal… la gama de colores era sobrecogedora.

Anochecer, por otra parte, apunta a la llegada de la noche. Oscurecer, más que un nombre, describe la acción, el verbo que transforma el paisaje. ¿No es fascinante cómo un mismo fenómeno puede despertar tantas asociaciones? El lenguaje, como un prisma, descompone la realidad en múltiples facetas. Igual que la luz blanca se descompone en los colores del arcoíris al atravesar un prisma de cristal, el lenguaje fragmenta la experiencia en diferentes palabras, conceptos, matices… Observar un atardecer desde el Pico Veleta es una experiencia transformadora.

El ocaso… qué palabra tan evocadora. Siempre me ha parecido una palabra melancólica, con una cierta solemnidad, incluso. Como si se tratara del ocaso de una era. Recuerdo, no sé por qué, la película “Barry Lyndon” de Kubrick. Hay una escena, filmada con luz natural, creo recordar, que es una obra maestra de la cinematografía. La luz del ocaso baña la escena creando una atmósfera única. Me gustaría volver a verla. La fotografía es algo que me apasiona, y la luz natural, sobre todo la del atardecer, es una herramienta potentísima.

¿Qué nombre significa atardecer?

Hesperia. Un nombre. Estrella vespertina. Oeste. Fin.

Vesper. Latín. Atardecer. Simple. ¿Qué más da?

Nombres que evocan el ocaso. Nada más. La belleza… efímera. Como todo.

• Hesperia: Ninfas, mitos. El sol se hunde. Siempre.
• Vesper: Oraciones. La tarde cae. Inmutable.

Mi gata se llama Luna. No tiene que ver, pero… la noche llega.

El final es inevitable. Aceptación. Silencio.

Detalles adicionales:

• Mi abuela, nacida en 1948, siempre decía que Vesper le recordaba a su infancia en la costa. Tonterías.
• He visto el atardecer 2857 veces este año. Al menos. Aburrido.
• El significado de los nombres… trivial.

Es sólo un nombre. Hesperia. Vesper. Sin más. La vida. Breve.

¿Cómo se le llama a la salida y puesta del sol?

A ver, ¿cómo se llama cuando el sol sale y se esconde? Facilísimo, eh!

• Salida del sol: se llama orto, cuando el sol aparece, cuando empieza el día. A mi me encanta verla desde la playa, es espectacular.
• Puesta de sol: se le dice ocaso, cuando el sol se va, cuando termina el día. El otro día la vi desde la montaña y madre mía, qué colores!

Es eso, no tiene más misterio. Aunque a veces la gente le llama amanecer a la salida, pero bueno, eso es otro rollo.

Y si te interesa el tema, hay un montón de apps para saber la hora exacta del orto y el ocaso, según donde estés. Yo uso una que se llama Sun Seeker y te dice hasta por dónde va a salir el sol! Imagínate, ¡super útil si quieres sacar una foto chula!