¿Cómo puedo entrar a la Academia de Policía con tatuajes?

¿Cómo entro a la Academia de Policía con estos tatuajes, me pregunto a veces? La verdad, me da un poco de miedo, ¿no? Porque llevo estos dibujos en la piel desde hace años, son parte de mí, parte de mi historia… y ahora, de repente, son un posible obstáculo.

Recuerdo cuando me hice el primero, un pequeño colibrí detrás de la oreja, apenas visible. Ni siquiera pensé en el futuro, en la posibilidad de querer ser policía. Simplemente… lo hice. Después vinieron otros, más grandes, más significados… un dragón en el brazo, que simboliza mi fuerza interior, sabes? ¡Y la verdad es que me encanta!

Pero claro, la Academia… es otra cosa. He leído que los tatuajes no impiden el acceso, que lo importante es la explicación, que ya hay agentes con tatuajes… ¡Qué alivio saber eso! Aunque también pienso… ¿qué explicación daré? ¿Cómo les contaré la historia de cada uno sin sonar pretencioso o como un loco?

¿Será suficiente decir que son solo dibujos, expresiones de mi personalidad? O tendré que desmenuzar el significado de cada uno, como si estuviera en una terapia intensiva? Me da un poco de vértigo, la verdad. Pero, bueno, ¡al menos sé que no estoy solo! Que hay otros, que ya lo lograron. ¿Verdad que sí? Me imagino a un montón de agentes, con sus historias tatuadas en la piel, defendiendo la ley, cada uno con sus propios dragones o colibríes, sus propias luchas… Eso sí que es un golpe de esperanza.

En fin, seguramente todo se aclarará en la entrevista. Cruzaré los dedos, eso seguro. Y preparé la mejor explicación que pueda. Total, si he logrado superar otras cosas en mi vida, esto también lo superaré, ¿no crees?