¿Cuáles son las etapas del modelo de Tuckman?
El modelo de Tuckman describe el desarrollo de equipos en cuatro etapas:
- Formación: Inicio y conocimiento mutuo.
- Conflicto: Surgen desacuerdos y tensiones.
- Normalización: Se establecen normas y cohesión.
- Desempeño: El equipo trabaja de forma eficiente y coordinada.
¡Ah, el famoso modelo de Tuckman! ¿Quién no lo ha oído alguna vez en el mundo del trabajo en equipo? A ver, si me pongo a pensar en mi experiencia, creo que todos, absolutamente todos los equipos por los que he pasado, han recorrido, de una forma u otra, esas etapas que él describió.
Tuckman, un tipo listo, definió básicamente cómo se construye un equipo, desde que son cuatro desconocidos hasta que son una máquina engrasada. Y lo hizo en cuatro fases, que ahora te cuento como si estuviéramos tomando un café:
- Formación: Es como el primer día de clase, ¿te acuerdas? Todo el mundo con una sonrisa forzada, intentando caer bien, sin saber muy bien qué se espera de ti. Te presentas, dices lo que haces, intentas encontrar puntos en común con los demás. ¡Un rollo, la verdad! Pero necesario, ¿eh? Es cuando empiezas a tantear el terreno, a ver quién es quién.
- Conflicto: ¡Ay, la que se lía! Pasada la fase de “buenrollismo”, empiezan a surgir las diferencias. “Yo creo que esto se hace así…”, “Pues yo lo haría de esta otra manera…”. Y ahí saltan chispas. ¿Quién no ha tenido un encontronazo en un equipo? Yo me acuerdo una vez, en un proyecto de marketing… ¡madre mía! Dos personas, a grito pelao, defendiendo sus ideas. ¿Te imaginas? Fue tenso, pero al final, llegamos a una solución que funcionó. Aunque… ¿quizás podría haber sido más suave? No sé… Lo importante es que se gestionen bien estos conflictos, porque si no… ¡adiós equipo!
- Normalización: Después de la tormenta, llega la calma. O eso se supone, ¿no? En esta etapa, el equipo empieza a encontrar su ritmo, se establecen normas, se definen roles. Es como si, después de discutir, os sentarais a hablar y dijerais: “Venga, ¿cómo vamos a trabajar juntos?”. Se empieza a crear cohesión, un sentimiento de “somos un equipo”. ¿Sabes? Ese momento en que empiezas a confiar en tus compañeros y a apoyaros mutuamente.
- Desempeño: ¡Yuju! ¡Por fin! Aquí es donde el equipo funciona como un reloj suizo. Todo el mundo sabe lo que tiene que hacer, se coordinan a la perfección, los problemas se resuelven rápido. Es la fase en la que sacas el máximo rendimiento al equipo. Yo he tenido la suerte de vivirlo, y es una sensación increíble. Es como si todos estuvierais conectados, ¿sabes? Una sinergia total.
Así que ya ves, el modelo de Tuckman, más que un rollo teórico, es una radiografía de lo que pasa en la vida real. Un mapa para entender cómo funciona un equipo y para intentar gestionarlo lo mejor posible. ¿No crees?
#Etapas Grupo#Formación Equipo#TuckmanComentar la respuesta:
¡Gracias por tus comentarios! Tus comentarios son muy importantes para ayudarnos a mejorar nuestras respuestas en el futuro.