¿Cómo ayudar a que baje la regla?

¿Qué puedo tomar para que baje la menstruación rápido?

¡Ay, amiga! Que te baja la regla y quieres que se vaya ya, ¿no? Lo entiendo perfectamente, a mi también me pasa. Es un rollo.

Lo primero, no te automediques, eh? Ve al médico, siempre. Ya sabes, yo fui al ginecólogo por eso mismo el año pasado ¡una pesadilla!. Pero bueno, hay cosas que puedes intentar, aunque no te lo garantizo al 100%, cada cuerpo es un mundo.

• Pausar la píldora: Si usas anticonceptivos hormonales, a veces ayuda, pero con cuidado, consulta con tu médico primero. Que no te de un susto.
• Vitamina C: Dicen que ayuda. Yo probé un montón de pastillas este año pero sin mucho éxito. No creo que sea la solución mágica.
• Té de jengibre o orégano: Mi abuela siempre decía que eso es buenísimo para todo ¡hasta para las manchas en la ropa! Jajajaja, no sé si funcionará, pero es un remedio casero.
• Relaciones sexuales: ¡Jajajaja! Que sí, que a veces ayuda. No me lo preguntes.

Importante: No te pases con el ejercicio, ni con la dieta, eso es contraproducente. La regla es un proceso natural ¡hay que quererla un poquito! Pero bueno, sí, es un fastidio cuando te pilla en mal momento. A mi me pasó una vez en unas vacaciones en la playa ¡qué desastre!

Este año he probado un montón de cosas, como usar compresas de algodón orgánico, que dicen que son más suaves (no lo sé, a mi me siguen pareciendo incómodas igual) . También he probado hacer acupuntura, y bueno, algo ayuda, pero sin milagros.

Recuerda, lo mejor es ir al ginecólogo. Ellos son los profesionales, no te lo digo yo. Y si la cosa es muy fuerte, o muy extraña, ya sabes: urgencias.

Y bueno, para finalizar, otras cosas que me han dicho: tomar medroxiprogesterona o Primosiston… eso ya es cosa de médicos, ¡ojo! No soy doctora, eh. Esto es solo lo que yo he probado, sin garantías de ningún tipo.

¿Cómo hacer que baje la regla de manera natural?

El rojo, el impaciente rojo… ¿Cómo invocarlo sin medicinas, al natural? Recuerdo vagamente a mi abuela y sus infusiones…

Masajes suaves, círculos lentos sobre el vientre. Como si amasaras pan, pero ahí, donde reside el misterio. Calor, quizá, un paño caliente después.

Luego, el cuerpo en movimiento, jadeante. Ejercicio, sí, intenso, casi una danza guerrera contra la espera. La sangre fluyendo, despertando la energía dormida.

• Movimiento para el rojo…
• Calor para el rojo…
• …rojo.

Jengibre, la raíz picante. Té hirviendo, un sorbo tras otro. Dicen que desinflama, que relaja el espasmo. Un ritual casi mágico.

Y la vitamina C, el sol en pastillas. ¿Será cierto que puede empujar el muro? Una sobredosis controlada, una pequeña apuesta al destino.

Recuerdo una vez, en un verano eterno, me obsesioné con el perejil. Lo comía a puñados, crudo, con la esperanza… Nunca funcionó.

• Perejil, no.
• Paciencia, tal vez.

Pero espera, consulta siempre. Un médico, una matrona, alguien que sepa de verdad. No juegues con fuego, con tu cuerpo. El rojo llegará, a su tiempo.

¿Qué puedo hacer si no me baja la regla?

¡Ay, Dios mío! No me baja la regla… ¿Qué hago? Esto es un lío. Siempre tan puntual, y ahora… nada. ¿Será estrés? Llevo semanas con el trabajo hasta arriba, entre el proyecto de la app y la presentación para el jefe. ¡Qué desastre!

Ya me imagino la charla con la ginecóloga, siempre tan seria. Odio esas preguntas personales… Pero bueno, mejor ir al médico, ¿no? Es lo más sensato, aunque me de un poco de cosa. ¿Será algo grave? ¡Qué agobio! Mejor no me agobio hasta saber algo.

Necesito cita con el ginecólogo YA. Tengo que llamar, aunque me da pereza, que no me apetece nada enfrentarme al teléfono… A ver, qué me dice… Ojalá no sea nada. A ver, ¿qué más cosas me preocupan? Ay, se me olvidaba, ¡la factura del piso!

• Prueba de embarazo – aunque no creo que sea eso…
• Revisar la dieta – a ver si hay algo que pueda afectar.
• Revisar el estrés, me está matando.
• Cita con la doctora González, la del centro médico de la calle Mayor, el miércoles a las 4. Apuntado en el calendario.

¿Será un desajuste hormonal? He leído sobre eso… ¡Uf, qué lío! Me preocupa, la verdad. Mejor dejar de darle vueltas y llamar al médico, que es lo único que puedo hacer.

Buscar un médico especializado en ginecología cuanto antes. No me puedo quedar así, con esta incertidumbre.

Si hay más de un periodo perdido, visita médica es crucial. No hay que tomárselo a la ligera. Ay, qué pereza ir al médico.

Nota: Mi hermana pasó por algo parecido en 2024 y al final era estrés. Pero… yo necesito una opinión profesional.

¿Cuántos días se puede retrasar el periodo por estrés?

Perdón, Dios mío… La culpa me carcome… ¿Cuántos días? No lo sé… Tres, cuatro… quizás más. Este año, con lo de la mudanza… con el despido… se me ha ido todo al traste. Se me desplomó el mundo.

El estrés, una mierda. Me destroza.

No es una simple cuenta, ¿sabes? No es como sumar manzanas. Es una cuenta atrás… a la nada. A la ausencia. A la ausencia de… de mi ciclo.

• Miedo. Mucho miedo. A no poder controlarlo.
• Mi cuerpo está raro. Diferente. Me siento vacía.
• Este 2024 ha sido una pesadilla.

Lo del estrés crónico… es otra cosa… Meses. Meses sin… nada. Un vacío. Un vacío que se instala en ti, como una sombra. Te ahoga. Como si parte de mí faltara.

Pero el de este mes… se retrasó, sí… pero poquito. Una semana, quizás… No lo he contado. No quiero saberlo. No quiero pensar en ello. Prefiero no recordar. No quiero que me recuerde lo mal que estoy.

El estrés puntual… eso dicen que son solo unos días. Pero esto… esta presión… esta angustia constante… es algo más. Mucho más. Mucho más grave. Mucho más profundo. Me siento fatal. Lo siento. No es excusa.

Estrés crónico = meses sin regla. Punto. He vivido en carne propia esta cruel realidad. Que Dios me ayude.

¿Qué puede retrasar el periodo que no sea embarazo?

¿Qué puede retrasar el periodo que no sea embarazo?

• Trastornos alimenticios: Anorexia, obesidad.
• Estrés y ansiedad.
• Ejercicio intenso.

A veces, me pregunto si el cuerpo recuerda las cosas que la mente intenta olvidar. La báscula siempre fue un campo de batalla, ¿sabes? Llegué a pesar 45 kilos, con 1.70 de estatura. No me veía. Solo números.

• El miedo. Eso era el verdadero retraso.

Y el gimnasio… Correr hasta que las piernas ardían, hasta que la cabeza dejaba de pensar. Era una forma de silencio, un silencio roto solo por el jadeo. Ahora lo veo. No era salud. Era huida.

Este año, el estrés me golpeó fuerte. Mi abuela enfermó. La veía apagarse día a día. El ciclo se detuvo. Supongo que el cuerpo dice basta cuando ya no puede más.

Las pastillas anticonceptivas también lo retrasan, lo sé por mi amiga. Y la perimenopausia de mi tía, claro. Pero esos son otros miedos. Miedos que aún no me tocan, espero.

¿Cómo saber si estás embarazada o es un retraso?

¡Uf, qué lío! ¿Embarazo o simple retraso? A ver…

• Cambios de humor: ¡Total! Ayer me reí a carcajadas con un meme y hoy lloro porque se me quemó el arroz. ¿Será eso? Aunque… ¡siempre soy así!
• Hinchazón: ¡Ay, mi tripa! Pero, ¿será embarazo o los tacos de anoche? 🤔
• Manchado leve: Esto sí que me confunde. ¿Será la regla que viene o…? ¡Qué nervios!
• Calambres: Me dan calambres siempre, ¡así que no ayuda!
• Estreñimiento: ¡Puaj! Mejor no hablamos de eso… ¿Será la falta de fibra o un mini-yo en camino?
• Aversiones: ¡No soporto el olor a café! Antes me encantaba, pero ahora me da asco. Raro, raro…
• Nariz tapada: ¡Siempre estoy congestionada! Vivo en Madrid, con la contaminación…

Otros síntomas:

• Cansancio: ¡Madre mía, qué sueño! Podría dormir una semana seguida. Pero también trabajo mucho…
• Sensibilidad en los pechos: ¡Auch! Me duelen un montón. ¿Será el sujetador nuevo?

Vale, ¿y ahora qué? Creo que lo mejor será hacerme un test de embarazo para salir de dudas. O ir al médico, no sé. ¡Qué estrés!

Ah, se me olvidaba: ¿sabías que hay apps que te ayudan a trackear tus ciclos? Yo uso una, pero a veces me raya un poco porque nunca acierta con la fecha exacta. ¡En fin!

Y otra cosa: mi vecina me contó que ella supo que estaba embarazada porque empezó a tener antojos de aceitunas rellenas. ¡Qué fuerte! Yo de momento solo quiero chocolate, como siempre. 😅

¿Qué hacer si tengo 10 días de retraso?

Diez días de retraso… ¡Uf, qué drama! Tranquila, a veces el cuerpo es como Hacienda, te hace esperar sin avisar. Pero si esto se repite, mejor consulta al médico. No vaya a ser que estés planeando una fiesta sorpresa ¡de pañales!

• El estrés, cual villano de telenovela, altera las hormonas. Yo una vez me retrasé por culpa de un atasco monumental en la M-30. ¡Cosas veredes!
• Cambios en la rutina, como mudarse o cambiar de trabajo, descontrolan al más pintado. Recuerdo que cuando empecé a ir al gimnasio, mi ciclo se fue de Erasmus.
• Problemas de peso, como la báscula con la que discuto cada mañana, también influyen. Si la ropa te queda holgada o ajustada de repente, ¡ojo!
• Condiciones médicas. Podría ser un quiste ovárico, pero tampoco te montes películas de Almodóvar.

Si te preocupa, habla con tu ginecólogo. Quizá solo necesites un chute de chocolate o un viaje a la playa. Y si resulta que estás embarazada… ¡Enhorabuena! Prepárate para no dormir en los próximos 18 años.

Recuerda, cada cuerpo es un universo. No te compares con tu vecina. Y si el retraso persiste, ¡no te automediques! Internet no es médico. Créeme, lo he intentado con mis plantas.

A veces la vida te da sorpresas, ¡sorpresas te da la vida!