¿Cuándo aparece el estertor de la muerte?
El estertor de la muerte se manifiesta cuando la persona está inconsciente, en las últimas etapas de la vida. No causa dolor al moribundo, pero sí impacto emocional en familiares y cuidadores. Su aparición indica una fase terminal inminente.
¿Cuándo se presenta el estertor agónico?
Uf, qué difícil es esto. Recuerdo a mi abuela, el 15 de octubre de 2018 en casa, en Valladolid… esos ruidos… eran horribles, pero nadie le veía sufrir. Me dijeron que eran estertores.
Parecía que se ahogaba, un sonido húmedo, asfixiante. Fue terrible, muy duro. A mi me dejó descolocada, no sabía muy bien qué hacer.
El médico, nos explicó que era algo normal, un proceso natural en el final de la vida. Dijo que no la molestaba, que estaba inconsciente. Eso ayudó a la familia a sobrellevarlo un poco mejor.
Me dijeron que aparecen cuando la persona ya no está consciente. Un alivio saber que no siente dolor. Sin embargo, la imagen… me sigue impactando. Es un sonido… doloroso de escuchar.
Q&A:
- ¿Cuándo se presenta el estertor agónico? En las últimas fases de la vida, cuando la persona está inconsciente.
- ¿Causa molestias? No, la persona inconsciente no lo percibe.
- ¿Objetivo del tratamiento? Bienestar de la familia y cuidadores.
¿Cuánto tiempo pasa una vez que comienza el estertor de muerte?
¡Ay, Dios! 23 horas, dicen… ¿tan poco? Eso es… brutal. Mi abuela… uff, fue rápido con ella. Mucho más rápido. ¿Será que depende de la enfermedad? ¿O de la edad? Tengo 52 tacos, qué miedo me da pensar en eso.
El estertor es una señal horrible. Como una… una película de terror, pero de verdad. Recuerdo a mi tía… no, mejor no, demasiado duro.
Bostezar… ¡incluso inconscientes! ¿Cómo es eso posible? Es como si el cuerpo… se rindiera, ¿no? Como un último suspiro, literal. Qué locura.
- Enfermedades: cancer, Alzheimer, problemas cardiacos… todos esos monstruos.
- Edad: ¿Influye más en gente mayor? Claro, ¿no? Es lógico.
- ¿Hay algo que se pueda hacer? Más allá de lo obvio… ¿analgesicos? Aliviar el dolor, al menos… aunque ya sea tarde.
23 horas… una media. Pero claro, puede ser menos. ¡O más! ¡Miedo me da pensar en ello! La muerte… es tan… misteriosa. Me preocupa, ¿y a quién no? Me acuerdo de lo que vi en un documental, sobre un estudio en el hospital de la Cruz Roja de Madrid en 2024, ¡un dato interesante! Algo así como fases del estertor, pero no lo recuerdo bien. Debería buscarlo… más tarde. O mañana. Quizás.
El final es inevitable. Y eso, eso es lo peor. Tengo que llamar a mi madre, lleva tiempo quejándose de dolores en el pecho.
¿Cuándo aparecen los estertores?
Estertores: Fin de trayecto.
- Acumulación. Simple física, nada más.
- Reflejo ausente. El cuerpo se apaga, como una bombilla fundida.
- No dolor. Para el que respira así, claro.
- Faringe. Tráquea. Detalles técnicos, irrelevantes al final.
- Neurología severa. Deglución comprometida. El control se pierde.
Mi abuelo murió así. Era sordo como una tapia, pero podía sentir el silencio después.
¿Cómo es la respiración antes de la muerte?
El estertor de la muerte es básicamente un sonido húmedo al respirar. Me acuerdo, aunque no lo quiero recordar, de mi abuelo.
Estábamos en el salón de su casa en el pueblo, un día de julio. Hacía un calor…uff. Él ya llevaba días fatal, pero esa tarde…
-
Se ahogaba, como si tuviera agua dentro.
-
Un ruido feo, un gorgoteo.
-
Sus labios morados.
Mi madre no paraba de llorar, y yo…yo tenía un nudo en la garganta. Nunca olvidaré ese sonido, esa respiración. Era como si la vida se le escapara a borbotones. Ahora lo sé, era el estertor.
Horrible.
Información adicional (aunque no sé si sirve de algo):
-
No siempre pasa, ¿eh? Mi tía se fue en silencio.
-
Dicen que no sufren, o eso quiero creer.
-
Es por la acumulación de fluidos, me explicó el médico después. Fluidos que el cuerpo ya no puede expulsar.
-
Es una señal de que el final está cerca, muy cerca.
¡Qué mal rato! ¿Por qué me acuerdo de estas cosas justo ahora?
¿Cómo saber si una persona está en sus últimos momentos?
¡Ay, la parca! Siempre llegando sin avisar… como un fontanero un sábado por la noche.
Para saber si alguien está a punto de hacer su “gran transición”, fijate en estas señales (y no, quejarse del precio de la gasolina no cuenta):
- Delirium: La mente juega al escondite, pero tú eres el que se pierde.
- Fatiga nivel “oso hibernando después de una maratón”: El cuerpo se rinde, como yo después de intentar montar un mueble de IKEA.
- Dificultad para respirar: Cada bocanada se vuelve una negociación.
- Dolor: A veces el cuerpo es un disco rayado, repitiendo la misma canción de dolor.
- Tos: No confundir con el concierto de las abejas, aunque a veces suene igual.
- Estreñimiento: Ni la fibra de la abuela puede con esto.
- Dificultad para tragar: Hasta el agua parece cemento.
- Estertor de muerte al respirar: Suena como Darth Vader resfriado… un poco tétrico, lo sé.
Y aunque estos síntomas son comunes, cada persona es un universo. Recuerdo cuando mi tío Paco, justo antes de irse, insistió en que le leyera las instrucciones del microondas. ¡Un genio hasta el final!
Importante: Si ves estas señales, contacta a un médico. Ellos son los verdaderos fontaneros de la vida.
Bonus Track:
- Menos hambre y sed: El cuerpo ya no pide la carta, prefiere el postre directamente.
- Desconexión: El mundo se desdibuja, como un recuerdo lejano.
- Cambios en la piel: A veces se pone fría y pálida.
- Incontinencia: El cuerpo relaja las normas, como un viernes por la noche.
Un consejo personal: No te obsesiones con los síntomas. Lo importante es estar ahí, ofrecer compañía y amor. Que se sientan rodeados, no examinados. Y si te piden que les leas las instrucciones del microondas, ¡hazlo! Nunca sabes si es su último deseo.
¿Cuánto dura el ronquido de la muerte?
El estertor agónico, ese sonido gutural, húmedo, no causa dolor.
Horas… días… el tiempo se dilata, se vuelve líquido. Pienso en mi abuela, en su habitación iluminada por el sol de la tarde, el polvo danzando en el aire. ¿Cuánto duró? No lo sé realmente. Solo sé que la quietud final fue un alivio, un silencio denso, casi palpable, un vacío inmenso.
Su duración es variable, una danza macabra entre la vida que se aferra y la muerte que reclama. No hay cronómetro para este último aliento. El reloj deja de importar.
Y quizás, sólo quizás, unas pocas horas.
Información adicional (a mi manera):
- El sonido es provocado por fluidos en las vías respiratorias.
- La posición del cuerpo puede influir.
- Medicamentos pueden ayudar a reducir la producción de fluidos.
- Recuerdo el olor a alcanfor en la habitación, el silencio después…
- La fragilidad de una flor marchita.
- Una foto sepia, descolorida por el tiempo.
- La textura rugosa de su mano, ahora fría.
- El eco de su risa en mi memoria.
¿Qué son los estertores premortem?
Los estertores premortem: un susurro final.
Los estertores premortem son ruidos respiratorios agónicos, producidos por el movimiento de secreciones en las vías respiratorias bajas, específicamente en la hipofaringe y el árbol bronquial, durante las últimas etapas de la vida. Piensa en ello como el último suspiro, un sonido que evoca la fragilidad de la existencia. Es una manifestación física del final, un recordatorio tangible de nuestra mortalidad. ¿No es fascinante cómo incluso en la muerte, el cuerpo nos habla? Mi abuela, hace dos años, los presentó en sus últimas horas. Fue un momento intenso.
Suelen ser audibles sin necesidad de instrumentos. El sonido, a menudo descrito como un goteo, gorgoteo o ronquido, se debe al pasaje del aire a través de las secreciones, las cuales pueden ser abundantes y viscosas por la disminución de la función de la tos en el paciente. Curiosamente, la percepción de este sonido varía según el contexto y la experiencia del oyente. Esto me recuerda la subjetividad de la experiencia humana, incluso en momentos tan aparentemente objetivos como la muerte.
No son un indicador de dolor necesariamente, aunque sí reflejan una etapa avanzada de la enfermedad terminal. Es importante entender que su presencia, aunque dramática, no implica necesariamente un sufrimiento extremo. El cuerpo, en su silencio final, a veces nos sorprende.
- Características:
- Ruidos respiratorios
- Secreciones en hipofaringe y árbol bronquial.
- Audible sin instrumentos.
- Sonidos: goteo, gorgoteo, ronquido.
Diferencias con otros ruidos respiratorios: Es crucial distinguirlos de otros ruidos respiratorios como sibilancias o crepitantes, que pueden presentarse en otras patologías. El contexto clínico es fundamental para un diagnóstico preciso. Esto me hace pensar en la importancia de la observación meticulosa en la medicina.
Implicaciones: No existe tratamiento específico, pues son un signo de una condición terminal, el enfoque se centra en el confort del paciente y en el apoyo a la familia. La gestión del dolor y la sedación paliativa son esenciales.
Nota: La información anterior está basada en mi conocimiento actualizado de 2024 y no sustituye la consulta médica profesional. La experiencia personal mencionada es anecdótica y no debe considerarse como un criterio diagnóstico.
¿Qué es la preagonia?
Preagonia… uf, qué palabra tan rara. Es como el final, el apagón. Pero no el apagón de la luz, sino el del cuerpo. Se me va la cabeza… ayer vi un documental sobre la muerte… o era sobre gatos? ¡Qué más da!
La preagonia, eso sí lo recuerdo. Agotamiento total. Como cuando haces 100 abdominales seguidas, pero multiplicado por mil… y sin poder parar. Dos o tres días… ¿dos o tres? Mi abuela murió rápido, casi sin preagonia. ¿Será que eso es mejor?
Mi primo, el médico, me contó algo… algo de funciones vitales… ¿qué era? ¡Ah, sí! Caída irreversible. Como una montaña rusa que llega al final y solo queda caer. No hay vuelta atrás, es el final de la película.
- Caída de funciones vitales.
- Agotamiento físico total.
- Irreversible.
- Últimos días de vida.
Este año, una vecina murió así… fue horrible verla. Se apagaba poco a poco… como una vela. ¿Será doloroso? ¿Cómo será morir? Preguntas sin respuestas. Y luego… ¿el más allá? ¡Ay, Dios mío! Mejor dejo de pensar en eso.
La preagonia es el fin. Punto. Debería escribir mi testamento… o llamar a mi madre. No, espera… mejor café.
Nota: Mi abuela murió en 2024. El documental de gatos lo vi hace dos semanas. Es de National Geographic. Ah, y mi primo es cardiólogo.
¿Cuánto dura la fase preagónica?
¡Uf!, la preagónica… Recuerdo a mi abuela, 2024, en el hospital de Sant Pau, Barcelona. Duró casi tres semanas, un infierno. Ella, tan vital, quedando tan… apagada. Cada día era peor, una lenta agonía. Sus respiraciones, tan entrecortadas, me rompían el alma. Verla así… No podía soportarlo. El olor a medicamento en la habitación, persistente, incluso ahora me lo evoca. Sentía impotencia, una rabia sorda.
La fase agónica fue mucho más rápida, creo que fueron sólo dos días. Recuerdo la enfermera, su rostro cansado pero amable. Me dijo que ya se acercaba el final. No quería creerlo. Todo se movía lento, a cámara lenta. Los días se estiraban como chicle. Me aferraba a la esperanza, a la posibilidad de un milagro, aunque en el fondo… sabía.
- Sensación de vacío.
- Mucha angustia.
- Desesperación.
- Incertidumbre.
- Fatiga extrema.
La preagónica es un martirio, una espera desesperante. La agónica es más corta, una liberación. Las horas se hicieron eternas, horas que se convirtieron en días y esos días en una pesadilla. Todo un calvario. No deseo eso a nadie. La tristeza persiste aún, aunque intenté ser fuerte por ella. Aún se me encoge el corazón. Fue… duro. Brutal. Horrible. Pero acabó. Espero que descanse en paz.
¿Qué son los momentos de lucidez?
¡Ay, madre mía, los momentos de lucidez! ¡Como si un rayo de sol atravesara un pantano de olvido!
Esos fogonazos de genialidad en medio del caos demencial. Es como si tu abuela, que lleva meses creyendo que es Napoleón, de repente te recitara la receta de su pastel favorito, ¡con todos los ingredientes y cantidades exactas! Increíble, ¿verdad? Mi tía Carmen, que tiene Alzheimer, tuvo uno el mes pasado: ¡se puso a tejer un jersey con un solo palillo, como si nada! ¡Y salió perfecto!
¿Qué más te puedo contar? Son breves instantes de claridad que aparecen en personas con demencia severa, como una bocanada de aire fresco en una mina de carbón. ¡Sorpresa tras sorpresa! Un momento, ¡que se me va la olla! ¡Es que a veces me pasa lo mismo con el azúcar!
- Aparecen de forma inesperada, como un grillo saltando en un concierto de ópera.
- Son comunicaciones claras, ¡zas en toda la boca del olvido!
- Tienen sentido, ¡a diferencia de la mayoría de mis conversaciones de whatsapp a las 3 de la mañana!
- Son increíblemente relevantes para la persona ¡aunque no lo parezca a primera vista!
Y hablando de relevancia…el otro día, mi perro se comió mis zapatillas, ¡y la verdad, no es momento de lucidez eso! ¡Eso sí que es una pérdida de coherencia! A propósito, hay investigaciones en 2024 que apuntan que…¡uy, que se me olvidó lo que iba a decir! ¡Qué cosas!
En resumen, son milagros de la mente. ¡Como encontrar un billete de 50 euros en la lavadora! ¡Un hallazgo inesperado y sumamente agradable! ¡Pero que se acaba tan rápido como llega! ¡Qué pena!
Ah, se me olvidaba: la ciencia no sabe bien por qué ocurren, pero mi teoría personal es que son los espíritus de nuestros antepasados intentando comunicarse con nosotros. ¡O quizás sea solo la cafeína!
Comentar la respuesta:
¡Gracias por tus comentarios! Tus comentarios son muy importantes para ayudarnos a mejorar nuestras respuestas en el futuro.