¿Qué tiene el interior de la Luna?

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El núcleo lunar, similar al terrestre, presenta una estructura en capas: un núcleo externo líquido de 362 km de radio y un núcleo interno sólido de 258 km. Su alta densidad (7,822 kg/m³) indica una significativa composición de hierro.
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El Misterioso Interior de la Luna: Revelando sus Secretos Ocultos

A pesar de su apariencia desolada, el interior de la Luna esconde un mundo fascinante de complejidades geológicas. A diferencia de la Tierra, la Luna no tiene un campo magnético global y su actividad sísmica es casi inexistente. Sin embargo, estudios recientes han arrojado nueva luz sobre la estructura interna de nuestro satélite natural, revelando una historia inesperadamente rica.

Núcleo Lunar: Una Estructura en Capas

En el corazón de la Luna se encuentra su núcleo, similar en estructura al de la Tierra. Este núcleo está compuesto por un núcleo externo líquido de aproximadamente 362 kilómetros de radio, envuelto por un núcleo interno sólido de unos 258 kilómetros de diámetro. La alta densidad del núcleo (7,822 kilogramos por metro cúbico) sugiere una composición predominantemente de hierro.

La presencia de un núcleo líquido se ha atribuido a la formación temprana de la Luna, cuando los impactos masivos provocaron un intenso calentamiento y derretimiento. Este núcleo líquido se habría enfriado y solidificado gradualmente a lo largo del tiempo, dando lugar al núcleo interno sólido.

Falta de un Campo Magnético Global

A diferencia de la Tierra, la Luna carece de un campo magnético global. Esto se debe a que su núcleo externo líquido es demasiado pequeño y se ha enfriado demasiado para generar las corrientes convectivas necesarias para crear un campo magnético.

Actividad Sísmica Lunar

La Luna experimenta ocasionalmente “lunamotos”, que son terremotos de baja magnitud. Estos lunamotos se atribuyen principalmente a las tensiones generadas por el enfriamiento gradual del núcleo y la corteza de la Luna.

Misterios Continuos

A pesar del progreso realizado en nuestra comprensión del interior de la Luna, todavía quedan muchos misterios por resolver. Por ejemplo, se desconoce el tamaño exacto del núcleo interno y la composición detallada del núcleo externo. Además, el mecanismo exacto que impulsó la formación del núcleo de la Luna sigue siendo un tema de investigación activa.

A medida que las futuras misiones espaciales continúen explorando la Luna, esperamos descubrir aún más secretos ocultos dentro de este enigmático cuerpo celeste. El interior de la Luna no solo es un testimonio de su pasado violento, sino que también puede proporcionar información valiosa sobre la formación y evolución de los planetas rocosos de nuestro sistema solar.