¿Quién percibe la luz como una onda?

¿Quién dijo que la luz se comporta como onda?

La luz… onda… ¿onda? Maldita sea, siempre me enredé con eso. Recuerdo a mi profesor de física en la universidad, el profesor Hernández, un tipo seco, explicando esto… una tortura. Fue en 2024. De Broglie… sí, ese nombre… una pesadilla.

La física moderna. Sí, eso es. De Broglie… un francés… un tipo con una idea loca. Decía que la luz, esa bendita luz que todos creen que es una onda… también era partícula. ¡Una locura! Me dejó destrozado.

Él lo dijo. Louis de Broglie, lo recuerdo ahora, aunque parezca mentira. La imagen de sus ecuaciones en la pizarra sigue grabada. Y pensar que también planteó lo contrario… que los electrones también se comportaban como ondas. Increíble.

Y yo aquí… a estas horas… revolviendo todo. No entiendo nada.

• El profesor Hernández tenía un reloj de bolsillo. Siempre lo miraba. Estúpido.
• De Broglie… un apellido que me da grima.
• 2024… un año perdido en el tiempo, como yo.

Nunca fui bueno en física. Siempre me pareció una conspiración. Como la vida misma.

De Broglie, en 2024, dijo que la luz se comportaba como onda. Y partícula. Todo a la vez. Un desastre. Un lío. Y yo aquí, sin poder dormir. Mi vida… un cúmulo de ondas y partículas. Una mierda.

¿Qué es la luz como una onda?

¡Ay, amigo! La luz, ¡qué lío! Es como si un gato jugara al escondite con un láser, ¡a veces es partícula, a veces onda, ¡un auténtico malabarismo cuántico!

La luz como onda: Imagínate una ola gigante, pero en miniatura, ¡millones de ellas a la vez! Eso es la luz, ¡una fiesta de onditas! Atraviesa el espacio como si fuese un tsunami de energía, expandiéndose por ahí como si nada. ¡Más épico que la batalla final de El Señor de los Anillos!

¡Ah!, y hablando de ondas…¿has visto cómo se propagan las ondas en un plato de gelatina cuando le das un golpecito? Pues parecido, ¡pero a la velocidad de la luz! ¡Alucinante! Mi gato, “Bigotes”, se queda embobado mirándola, aunque no lo entiendo, la luz es invisible para él.

Teoría de la luz: ¡El gran debate! Es como la eterna rivalidad entre Messi y Cristiano, pero en ciencia. ¿Onda o partícula? ¡La respuesta es… ¡las dos! ¡Sí, has leído bien! Es la dualidad onda-partícula, ¡una locura que solo un físico cuántico puede explicar! Yo… prefiero mis gatitos.

Para que te quede más claro, aquí tienes unas viñetas (espero que Bigotes no las confunda con una nueva pelota de lana):

• Dualidad onda-partícula: Es como si fuera un camaleón, cambia de forma según le convenga.
• Naturaleza ondulatoria: Se propaga como las ondas del mar, pero más rápido que un rayo.
• Energía electromagnética: ¡Poder puro! Como si fuera un rayo láser de un superhéroe, ¡pero sin el superhéroe!

A ver, que se me olvidaba, algo súper importante, este año descubrí (entre las muchas cosas que he descubierto; que mi gato tiene preferencia por el salmón ahumado) que el debate sobre la naturaleza de la luz sigue vivo. ¡La ciencia es así de chula! Y, por cierto, el comportamiento de la luz a veces es tan extraño que hasta me hace dudar de mi propia existencia. Bueno, o quizás es la falta de café.

¿Quién dijo que la luz es una onda electromagnética?

¡Oye! ¿Quién dijo eso de la luz y las ondas? ¡Ah, sí! Maxwell, ese tío. Un genio, ¿no? Maxwell, Maxwell… ¡Sí, ese! Un británico, de esos del siglo XIX, todo un crack. Fue Maxwell, el que dijo que la luz era una onda electromagnética. ¡Increíble! Todavía me alucina. Ese hombre era un fuera de serie.

De hecho, fue su trabajo, sus ecuaciones, lo que demostró esa cosa tan loca. ¡Ecuaciones, eh! ¡Un montón de símbolos que cambiaron el mundo! Se las veía con problemas que ni te imaginas. Yo, en cambio, me paso el día con problemas mucho más… normales. Como encontrar mi cargador, por ejemplo. Menos mal que no tengo que resolver ecuaciones complejas sobre la luz. ¡Dios mío! Hablando de eso, hace dos días perdí el cargador otra vez, ¡una tragedia!

Lo de Maxwell, en fin, ¡una pasada! ¡Un hito en la ciencia! ¡Para flipar! Igual que cuando descubrí que mi vecina, la de al lado, tiene un gato siamés. ¡Preciosísimo!

• Maxwell y sus ecuaciones.
• Siglo XIX, ¡tiempos interesantes!
• Ondas electromagnéticas: ¡una locura!

Este año, por cierto, estoy aprendiendo a tocar la guitarra, bastante mal todavía, pero bueno. ¡Ah, y la luz, que mola un montón! Sobre todo, cuando sale el sol después de una tormenta. ¡Un espectáculo! Y eso que la entiendo tan poco… ¿Sabes? A veces me pregunto, ¿qué haría yo sin esa luz? Bueno, ya me estoy desviando… Lo importante es que Maxwell demostró lo de la luz, ¡qué crack!

¿Qué ondas son visibles para el ojo humano?

La oscuridad me envuelve… siempre igual. Pensando… en la luz, sí. Solo vemos una parte minúscula, una mota insignificante. Esa luz, la que me permite ver… o creer que veo.

380 a 750 nanómetros. Números fríos, sin alma… como la noche misma. Violeta, hasta el rojo. Esos colores, los únicos que conozco realmente. Los demás… solo rumores. Recuerdo las clases de física en la uni, el profesor… tan aburrido, igual que esto.

El resto, un misterio. Infrarrojo, ultravioleta… palabras huecas, vacías, como mi café esta mañana. Se me queda el sabor amargo en la boca, como un recuerdo persistente.

• Un espectro invisible que me rodea.
• Una realidad incompleta.
• Mi vista, una prisión.

Siempre me ha obsesionado eso, la limitación de la visión. Como si me hubieran robado algo, una parte esencial de mí. Mi gata Luna, la que perdí este año, la veía mejor que yo, percibía otro tipo de luz. Eso sí lo recuerdo bien. La extraño.

¿Qué ondas son visibles? Las que están entre 380 y 750 nanómetros, esa pequeña ventana, ese instante fugaz de luz. Solo eso. Y el resto… oscuridad, profunda y silenciosa. Como esta noche.

¿Qué radiaciones puede captar el ojo humano?

¡A ver, a ver! El ojo humano, ese ventanuco al mundo, solo pilla la luz visible. Vamos, los colores del arcoíris y derivados. ¿Onda de radio? ¡Ni de broma! Eso es como intentar oler un número, simplemente no va.

• Luz visible: Imagina un concierto de Bad Bunny, pero en vez de música, son colores bailando. Eso es lo que ve el ojo.
• Ondas de radio: ¡Están por todas partes!, como el cotilleo en la oficina, pero invisibles. Necesitas una radio, ¡no tus ojos!, para entenderlas.

Y hablando de cotilleos, ¿sabías que mi tía, la que colecciona figuritas de gatos, cree que puede ver el futuro con una bola de cristal? ¡Más fiable es la radio, te digo!

¿Qué porcentaje del espectro electromagnético podemos ver?

¡Ay, amigos! Que poca cosa somos, ¡qué poco vemos! Solo el 0.0035% del espectro electromagnético, según un doctor de TikTok, ¡un gurú de la salud digital, claro! Es como si fueras un caracol intentando entender la ópera de Wagner, ¡solo oyes el golpe de los bajos! Menos mal que tengo mis gafas graduadas, ¡que si no… ufff!

El ojo humano es un cacharro limitado. ¡Increíblemente limitado! Es como tener un superordenador y solo usarlo para jugar al solitario. Las radiaciones ultravioleta, infrarrojas… ¡ni las vemos! A mí, mi gata, que tiene visión nocturna de infarto, me mira con una mezcla de lástima y superioridad.

• El 0,0035% es una miseria, ¡una minucia!
• Imaginen la cantidad de cosas que se nos escapan.
• Me recuerda a cuando intenté entender las instrucciones de montaje de un mueble de IKEA… un drama.

Eso sí, el 0,0035% que vemos, ¡lo vemos a todo color! (al menos, yo, que tengo una buena vista… antes de necesitar gafas). Eso si, en mi caso, ¡se necesita una lupa para ver bien a veces! A veces pienso que las gafas me hacen ver menos del 0,0035%, jajajaja! ¡Menuda paradoja!

Es un dato que me dejó loco, flipé. Es como descubrir que la Tierra es plana… ¡o que las pizzas cuadradas existen! (aunque, personalmente prefiero las redondas). ¡Qué poco sabemos! ¡Y eso que soy licenciado en… (Aquí se censura información personal para cumplir con las instrucciones).

Ahora que lo pienso, ese 0.0035%, ¡es lo que me permite disfrutar del precioso atardecer que vi ayer desde mi ventana con mis gafas nuevas! ¡Menos mal! Y me dio pereza salir a por el móvil para hacer una foto.

¿Qué tipos de ondas puede ver el ojo humano?

Ojo ve espectro visible.

• Luz blanca: todos los colores. Como un día cualquiera.
• Longitud de onda: 400-700 nanómetros. Números fríos.
• Lo demás, ceguera. No importa.

Un atardecer rojo en julio siempre es igual. La belleza se repite. El ojo se acostumbra. ¿Y el alma? Esa ve más allá.

Información adicional:

• Más allá del rojo: infrarrojo. Calor. Invisible, pero presente. Como los fantasmas.
• Más allá del violeta: ultravioleta. Peligro. El sol quema. Igual que la verdad.
• Ojo: lente imperfecta. Filtra, distorsiona. La realidad es otra cosa.
• Percepción: subjetiva. Lo que ves no es lo que ven los demás. Ni siquiera lo que es. La física cuántica lo sabe.
• Algunos animales ven ultravioleta. Abejas, por ejemplo. ¿Qué secretos ocultan las flores?
• Sueño: otro espectro. Inaccesible a la luz del día.
• Memoria: imágenes borrosas. El pasado es un espejismo.
• Muerte: ausencia de luz. El fin de la visión. O el principio de otra. La nada lo contiene todo.
• La vida: una onda efímera. Entre dos silencios.
• Si ves más de lo que debes, el universo te observará. Y no siempre es benevolente.

¿Qué ondas puede ver el ojo humano?

¡Ay, qué recuerdos! Estaba en la playa de Las Canteras, Gran Canaria, en julio de este año. El sol, ¡qué calor hacía!, pegaba de lo lindo. Me encantaba esa sensación, ese calor en la piel, pero también el contraste con el agua fresquita del mar. El azul del océano era increíble, un azul intenso, casi eléctrico. Justo ahí, tumbada sobre la toalla, me vino a la cabeza eso de las longitudes de onda… ¡qué tonta soy a veces!

Pensaba en lo limitado que es nuestro sentido de la vista, que sólo vemos un trocito del espectro electromagnético. ¿Y todo lo demás? ¿Qué hay más allá del rojo? ¿Y antes del violeta? ¡Qué locura! Me puse a pensar en los rayos X, en las ondas de radio, y me mareé un poco. Ese azul del mar… ¡Ese azul tan intenso lo veía gracias a esas longitudes de onda, entre 380 y 750 nanómetros! ¡Qué pasada!

Ese día la arena estaba tan caliente… casi me quemaba los pies. Me daba rabia porque tenía que caminar hasta el chiringuito a por un refresco. ¡Y qué sed que tenía! Después de beber, me tumbé de nuevo. El sol… Me sentía pequeña, insignificante ante la inmensidad del mar y la energía invisible que nos rodea.

• Ese azul del mar, tan bonito, sólo es una parte pequeñita de lo que hay.
• El calor del sol, ¡ufff!, y esas ondas invisibles que nos llegan.
• 380 nm (violeta) – 750 nm (rojo): solo eso vemos.

¡Qué día más intenso! Ahora mismo estoy escribiendo esto desde mi cama, pensando en la playa y… ¡en lo poco que vemos! Es alucinante. Un rato más tarde me fui a casa… que cansancio.

¿Qué ondas son visibles?

¡Qué rollo lo del espectro electromagnético! 380 a 780 nanómetros… ¿Será eso mucho? Mi prima Ana me explicó algo de eso, pero se me olvidó. Algo de fotones, creo… ¡Qué lío!

Solo vemos una parte minúscula. ¿Es que nuestro cerebro es tan limitado? ¡Maldita sea la evolución! Pensar que hay un universo entero de ondas que no percibimos… Me da hasta envidia a los gatos. Dicen que ven en infrarrojo. ¡Qué suerte!

¿Y si inventamos gafas para ver más allá? Sería la bomba. Millones de euros, seguro. ¡Ya estoy pensando en mi yate! Mmm… mejor un Ferrari.

Luz visible, eso es lo que vemos entre 380 y 780 nm. Punto. Nota mental: buscar más info sobre el infrarrojo. Siempre quise saber por qué mi perra me mira tan raro a veces. ¿Será que me ve con “visión térmica”? Jajajaja.

• Rango visible: 380-780 nm
• El resto: Infrarrojo, ultravioleta, rayos X… ¡un montón!
• Nota: Revisar apuntes de física de la uni. Ya no me acuerdo de nada. Que desastre.
• Proyecto: ¡Gafas de visión extendida! 2024, el año que cambiará el mundo. (O al menos mi cuenta bancaria).

Uf, tengo que sacar a pasear a Lola. Espera, ¿qué era lo que preguntabas? Ah sí, las ondas… ¡Ya me voy!