¿Dónde se detecta el umami en la lengua?

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El sabor umami se detecta principalmente en los laterales y la zona intermedia de la lengua, aunque investigaciones recientes sugieren una posible distribución más uniforme. A diferencia de dulce y salado (punta) o amargo (espalda), el umami no se limita a un área específica.
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Detección del Unami en la Lengua: Una Distribución Sorprendente

El umami, el quinto sabor fundamental, es un sabor agradable y sabroso que se encuentra en alimentos como los tomates, los champiñones y el queso parmesano. A diferencia de los sabores dulces, salados, amargos y agrios, que se detectan en áreas específicas de la lengua, la distribución del umami ha sido objeto de debate hasta hace poco.

Distribución Tradicional

Tradicionalmente, se pensaba que el umami se detectaba principalmente en los laterales y la zona intermedia de la lengua. Esta distribución fue respaldada por estudios que utilizaron técnicas de mapeo de la lengua, que demostraron que las células receptoras del umami estaban concentradas en estas áreas.

Investigación Reciente

Sin embargo, investigaciones más recientes han desafiado esta distribución. Los estudios que utilizan imágenes de resonancia magnética funcional (fMRI) han demostrado que el umami puede activar áreas más amplias de la lengua, incluida la punta y la parte posterior.

Uno de esos estudios, publicado en la revista Nature Neuroscience, mostró que los receptores del umami en la punta de la lengua respondían tanto al umami como a los sabores dulces. Además, el estudio encontró que la actividad cerebral relacionada con el umami estaba distribuida uniformemente en toda la lengua, lo que sugiere que el umami puede detectarse en múltiples ubicaciones.

Implicaciones

Esta nueva comprensión de la distribución del umami tiene implicaciones para nuestro entendimiento del gusto y el diseño de alimentos. Ahora sabemos que el umami no está restringido a un área específica de la lengua, lo que significa que los alimentos pueden diseñarse para estimular diferentes partes de la lengua para crear experiencias de sabor más complejas.

Además, la distribución más uniforme del umami podría explicar por qué algunos alimentos como las sopas y los guisos saben tan ricos, ya que estimulan una gama más amplia de receptores del umami en la lengua.

Conclusión

La investigación reciente ha remodelado nuestra comprensión de la distribución del umami en la lengua. A diferencia de los sabores dulce, salado, amargo y agrio, que se detectan en áreas específicas, el umami se distribuye más uniformemente, abriendo nuevas posibilidades para el diseño y la apreciación de los alimentos.