¿Cómo se cura una quemadura en la boca?

¡Ay, me quemé la boca! Cómo aliviar y curar una quemadura bucal leve

Una quemadura en la boca, aunque generalmente leve, puede ser muy molesta. Desde una taza de café hirviendo hasta un trozo de pizza excesivamente caliente, hay muchas formas de sufrir una quemadura bucal. La buena noticia es que la mayoría de las quemaduras en la boca son superficiales y se pueden tratar fácilmente en casa. Aquí te ofrecemos una guía práctica para aliviar el dolor y promover la curación si te has quemado la boca:

El Primer Paso: ¡Frío Inmediato!

La clave para minimizar el daño de una quemadura leve es actuar rápido. El primer paso, y el más importante, es enfriar la zona afectada lo antes posible. ¿Cómo hacerlo?

• Hielo, tu mejor amigo: Introduce un pequeño trozo de hielo en la boca y mantenlo delicadamente en la zona quemada. No lo frotes, simplemente déjalo que actúe. El frío ayudará a reducir la inflamación y el dolor.
• Repite la operación: Mantén el hielo en la zona afectada durante unos minutos. Retíralo cuando se derrita y repite el proceso varias veces en la primera hora después de la quemadura.
• Alternativas al hielo: Si no tienes hielo a mano, puedes utilizar agua fría. Enjuágate la boca con agua fría varias veces. Otra opción es tomar pequeños sorbos de agua fría.

Medidas Adicionales a Considerar:

• Atención a tus manos: Si llevas anillos u otros objetos ajustados en los dedos, es crucial que los retires cuidadosamente. Si la quemadura es en la boca, es posible que la inflamación se extienda a la cara y a los dedos, dificultando la posterior extracción de los anillos. ¡Anticípate al problema!
• Evita la tentación de las lociones: En el caso de quemaduras leves en la boca, no es necesario aplicar loción ni cremas tópicas. La mucosa bucal es diferente a la piel y las lociones podrían irritar aún más la zona.
• Observa la evolución: Después de aplicar frío, observa la evolución de la quemadura. En la mayoría de los casos, el dolor disminuirá y la inflamación se reducirá.
• Dieta suave y sin irritantes: Durante los días siguientes, opta por una dieta blanda y evita alimentos ácidos, picantes, crujientes o demasiado calientes que puedan irritar la zona quemada. Sopas tibias, yogur, purés y batidos son excelentes opciones.
• Enjuagues bucales suaves: Enjuágate la boca con agua tibia con sal varias veces al día. Esto ayudará a mantener la zona limpia y a prevenir infecciones.
• Hidratación constante: Bebe mucha agua para mantener la boca hidratada y favorecer la curación.

Cuándo buscar atención médica:

Si la quemadura es extensa, profunda, si aparecen ampollas grandes, si tienes dificultad para respirar o tragar, o si experimentas fiebre, es fundamental que consultes con un médico o dentista de inmediato. También es recomendable buscar atención profesional si la quemadura no mejora en unos pocos días.

En resumen:

Las quemaduras leves en la boca suelen ser manejables en casa con medidas simples como aplicar frío, mantener una dieta suave y enjuagarse la boca con agua tibia con sal. Sin embargo, es importante estar atento a los signos de complicaciones y buscar atención médica si es necesario. Con los cuidados adecuados, tu boca se recuperará pronto y podrás volver a disfrutar de tus comidas favoritas.