¿Cómo quitar el exceso de sal de la comida?

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Para reducir la salinidad de una comida excesivamente salada, añade líquidos como agua, caldo o leche. Combina con ingredientes que contrasten el sabor, como limón, vinagre, azúcar o papas cocidas.
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Cómo mitigar el exceso de sal en las comidas

¿Alguna vez has cocinado un plato solo para descubrir que está demasiado salado? Si bien un poco de sal puede realzar los sabores, demasiado puede arruinar una comida entera. Afortunadamente, existen formas de reducir la salinidad sin sacrificar el sabor.

1. Dilución con líquidos

Una forma sencilla de reducir la salinidad es añadir líquidos. El agua, el caldo o la leche pueden ayudar a diluir la concentración de sal. Agrega gradualmente el líquido y prueba hasta que alcances el nivel de sabor deseado.

2. Combinación con sabores contrastantes

Los sabores ácidos, dulces y amargos pueden contrarrestar el sabor salado. Añade unas gotas de limón, vinagre o azúcar a tu comida. También puedes cocinar patatas cocidas y añadirlas al plato. La textura suave y el sabor suave de las patatas absorberán algo del exceso de sal.

3. Uso de almidones

Los almidones, como la harina, el arroz o la pasta, pueden absorber la sal. Incorpora almidones a la comida mezclándolos con un poco de líquido y agregándolos gradualmente.

4. Enjuague o remojo

Para platos como la sopa o las verduras, puedes enjuagar o remojarlos en agua fría. Esto eliminará parte del exceso de sal. Sin embargo, ten cuidado de no remojarlos demasiado, ya que también puede eliminar otros sabores.

5. Ajuste con otros condimentos

Si los métodos anteriores no son suficientes, puedes intentar ajustar el sabor con otros condimentos. Agrega hierbas frescas, especias o condimentos sin sal para equilibrar la salinidad.

Consejos adicionales:

  • Prueba la comida con frecuencia mientras la ajustas para evitar añadir demasiada sal o líquido.
  • Si la comida es demasiado salada para rescatarla, puedes considerar comenzar de nuevo con una nueva porción.
  • Para evitar que las comidas se vuelvan demasiado saladas en primer lugar, prueba la comida mientras cocinas y agrega sal gradualmente.
  • Usa sal kosher o sal marina gruesa, ya que es más fácil controlar la cantidad añadida.
  • Experimenta con diferentes técnicas para encontrar la que mejor funcione para tu plato particular.